Revista Libros
Hace tiempo que no actualizo el blog. Hace tiempo que no comento en vuestros blogs aún cuando me pase por ellos. Hace tiempo que no visito tantos blogs como desearía. Hace tiempo que no leo. Tengo tres libros de tres compañeros y amigos bloggers que sólo he empezado pero no he podido seguir, sól tengo tiempo para lectura de materiales de estudio). Hace mucho tiempo, además, (unos 7 meses, -así, escrito parece aún más tiempo) que no escribo.
El trabajo y el estudio me imposibilitan para seguir con la escritura (sin alarmas: hasta finales del mes próximo) y aún cuando anoto ideas y tengo varias cosas comenzadas veo con ansia el día en que dedique dos horas seguidas a sumergirme en un escenario nuevo, en un personaje, en una situación que vea ese mundo que hay detrás de éste. El descanso en la escritura es necesario, pero el virus interior está ahí, y quiere salir, es inevitable; pero lo detengo, lo sujeto, le pido que espere un poco, que se conforme con ir anotando ideas en el subconsciente, que tome nota de los sueños, de las experiencias, de las imágenes del día a día. Luego, el batido se emulsionará y saldrá a borbotones...
En otros asuntos, de mi libro en catalán Jo, Arbert Bernat (ganador de un premio comarcal que al final no fue editado) a petición de mi ayuntamiento le proporcioné un ISBN y lo edité con Bubok para poder ser distribuido en mi localidad, ya que está basado en el antiguo señor feudal. Así que ya tengo vendidos casi 200 ejemplares que no está nada mal para los tiempos que corren, y los beneficios de la venta tampoco están nada mal, y me permitirán algún capricho que otro.
Después de meses con los intentos de enviar LHDE a editoriales, he vuelto a la carga (un día= 4 envíos; en total debo llevar 15 como mucho) a ver si suena la flauta, porque empeño tampoco le pongo mucho.
No envío relatos a concursos; entre otras cosas porque no he podido escribir ninguno nuevo. El último, El inframundo, salió publicado en una antología en enero, 31 motivos para no dormir, de la editorial Círculo Rojo, de la que por cierto puedo decir que hace una edición excelente, muy pero que muy cuidada, muy al contrario de otras editoriales que publican antologías. Antología de concurso, por cierto, publicada sin solicitar dinero por participar en ella, sin solicitar dinero para que compres 10 ejemplares, ni siquiera uno: Tu ejemplar, como finalista (en mi caso) del concurso, te lo envían ellos regalado, como se ha hecho siempre.
Comento esto por la proliferación en la red de pseudo-concursos en los que tienes que comprar o pagar...no señores, si participas en un concurso y quedas ganador o finalista, recibes el libro gratis. Si quieres más ya es otro tema, pero nada de pagar por ello.
Y de momento esto es todo, amigos. Queda menos para poder leer vuestros libros, para poder reseñarlos, para poder escribir más entradas, para poder escribir algún relato. El tiempo pasa tan deprisa, pero es tan extraño...