Hoy, 20 de noviembre, fecha de grandes recuerdos democráticos, tenemos elecciones generales. Hoy se legitima, bien que poco más que instrumentalmente, que vivimos en una democracia. Poner una papeleta (que en muchos casos sirve de bien poco, dada la ley electoral vigente y el bombardeo mediático) en una urna como símbolo de un sistema que sólo es democrático, como máximo, en ese procedimiento, pero que no lo es en absoluto en el contenido, no debería bastar para hablar de democracia, pero los “demócratas de toda la vida” nos han ganado la guerra por la palabra, y Esperanza Aguirre, Fraga, Aznar, Mayor Oreja y otr@s como ell@s (nada sospechosos de provenir del franquismo, por otro lado) nos dictan qué es democracia y qué no lo es…
Deberíamos recordar que la democracia se hace cada día, con la participación activa de la ciudadanía, y no consiste en una delegación representativa que, además, no supone ningún tipo de “contrato”, ya que los programas electorales, como nos muestra sin género de duda la realidad, están simplemente… para incumplirse sin costo alguno para aquéll@s que dicen ser representantes de la soberanía popular.
Pero además, hay sitios donde se llega aun más lejos, como en la Comunidad de Madrid, donde, aplicando las reglas de la democracia más escrupulosa, esta mañana, a las 10’16 horas (esto es, hora y cuarto después de haberse iniciado las elecciones) la Junta Electoral lanzaba una norma que, cuanto menos, resulta… INDECENTE. Veamos cómo lo cuenta la agencia EFE: “Según un comunicado enviado a las 10.16 horas por a la Delegación del Gobierno firmado por el presidente de la Junta Electoral de Zona de Madrid, Jesús Mario Serrano, mediante acuerdo número 82/2011, ordena con carácter inmediato a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en coordinación con la Policía Municipal, que no permitan a los personas de la Administración, presidentes de mesa, vocales, apoderados o interventores que exhiban este tipo de camisetas” [podéis ver la noticia completa, donde incluso se expone la posibilidad de incurrir en delito en http://profesorgeohistoria.wordpress.com/2011/11/20/la-junta-electoral-prohibe-las-camisetas-verdes-a-los-miembros-de-mesa-apoderados-e-interventores/].
Causa sorpresa que puedan hacerse cosas como ésta durante unas elecciones, justo en el día que teóricamente es el más importante para un sistema democrático, el día en que supuestamente delegamos nuestra soberanía (aunque en realidad la delegamos ya hace mucho tiempo), el día que una vez cada 4 años aparenta dar legitimidad democrática a un sistema al que poco le importa el ciudadano más allá de este día donde pone su papeleta en la urna.
Porque hablamos de democracia. ¿Alguien puede explicarme qué comportamiento antidemocrático hay en exhibir una camiseta que dice “escuela pública, de tod@s para tod@s”? Supongo que nadie se habrá planteado que no se puedan llevar otro tipo de distintivos como trajes de 3.000 euros, o crucifijos, o camisetas del Real Madrid o del Barcelona, o de empresas explotadoras de trabajador@s como Zara, o…
Claro que hablando de Madrid es difícil extraer conclusiones lógicas. Ayer mismo se permitía un acto en homenaje a José Antonio Primo de Rivera. Quizá sea que mi visión “radical” esté tan sesgada que no me deja ver que las 300 personas que acudieron son demócratas intachables, mientras l@s que llevamos la camiseta verde debemos dejar muchas dudas sobre ello.
Si actuaciones como la de la Junta Electoral de zona de Madrid son democráticas, es evidente…. nuestra democracia, simplemente, es una mierda.
Por cierto, mientras se prohíben las camisetas verdes, hoy el muy democrático periódico El Mundo, intachable en todo, publicaba la esquela de los demócratas de toda la vida. En fin…