De campings por Portugal III (Parque de Campismo Cepo Verde, Bragança)

 PARQUE DE CAMPISMO CEPO VERDE (BRAGANÇA)

También ha sido la primera vez que pernoctamos en este camping a las afueras de Bragança, a unos 12 km. Se encuentra situado en el Parque Natural de Montesinhos, en una zona alta de montaña, en plena naturaleza.

Acceso al camping desde la carretera

Antes de continuar, aquí puedes ver el resto de entradas que he publicado sobre campings en Portugal:

• De campings por Portugal I (Parque de Campismo de Barra, Aveiro)
• De campings por Portugal II (Parque de Campismo Municipal de Mogadouro, Bragança)

Después de ir hasta el Area de Campismo Municipal de Bragança, el camping municipal y en el que ya habíamos estado en otra ocasión, descubrimos que se encontraba cerrado a causa del Covid, y la otra opción que había era éste camping. Un punto menos para los que gestionan el turismo de la zona, ya que no les hubiera costado nada poner en los carteles que hay en la autovía y en la carretera de acceso, que se encontraba CERRADO PERMANENTEMENTE, y así hubiéramos ido directos al Cepo Verde.

Entrada al camping, con la recepción a la derecha. Foto de www.montesinho.com

Lo primero que nos llamó la atención fue lo apartado que se encontraba de todo, en mitad de la montaña, con un acceso por carretera local llena de curvas. Lo segundo fue el precio, ya que la noche salía por unos 25€ (tres adultos, un coche, una tienda pequeña y electricidad), que aun no siendo caro, nos pareció algo excesivo en comparación con otras opciones. También tienen la opción de los bungalows, casitas de piedra repartidas por el área del camping.
El camping dispone de unas 40 plazas, para un total de 140 personas. El acceso a la zona de acampada para los que llevamos tienda de campaña es un camino de cabras, cuesta arriba y de tierra, y conforme va discurriendo el camino, las parcelas están situadas al margen del mismo. No son, ni por asomo, igual de amplias que las del camping de Mogadouro, por poner un ejemplo, y la nuestra, por ejemplo, ni siquiera estaba recta, así que tuvimos que dormir con una ligera pendiente bastante incomoda. El suelo está tan duro que es imposible clavar las piquetas, y las tuvimos que dejarlas clavadas hasta la mitad.

Este es el camino que hay que recorrer con el coche, y al lado, las mini parcelas para las tiendas. Esta tienda es justo la que había antes de la nuestra.

Desde nuestra parcela, se puede ver como vuelve el camino y baja hacia los baños, aunque en la foto casi no se puede apreciar al fondo y abajo

Y el mismo camino, que vuelve a bajar, con la parcela siguiente a la nuestra.

Los baños y el resto de instalaciones se encuentra a la entrada del camping, y nuestra zona de acampada estaba bastante elevada, por lo que, cada vez que tenías que acceder al baño o a la ducha, tenías que bajar por una vereda cuesta abajo entre los árboles hasta llegar a las escaleras de piedra que te llevan a tu destino, ah, y si era de noche, ayudándote con una linterna o frontal, ya que la iluminación es mínima. Pero lo cierto es que las instalaciones comunes son muy cómodas y están nuevas. Eso si, tienen un sistema un poco extraño para afrontar el asunto del Covid. Al hacer el registro a nuestra llegada, nos dijeron que tanto en la parte de hombres como la de mujeres, había 4 duchas, 4 lavabos y 4 servicios, y nos asignaron el nº 3 de cada uno de ellos. Un sistema un poco raro, todo hay que decirlo.

Así son los baños, en este caso de los hombres: 4 duchas, 4 lavabos y 4 aseos. Eso si, las instalaciones, impecables. Foto de www.montesinho.com

Disponen de servicio de restaurante, tienda y piscina, a la cual, por cierto, se accede pagando 3€ por día. Es uno de esos campings naturistas, en el sentido de que se ve que han intentado modificar el entorno lo menos posible y donde hay carteles con consejos para ayudar a la conservación del medio ambiente.
Otro punto en contra es el horario para poder acceder con el coche, que es a las 10 de la noche. Pasando de esa hora, no puedes entrar con el vehículo, y lo tienes que dejar fuera de la puerta de entrada al camping, con lo que eso conlleva: subir a pie con todos los trastos o las compras.
Es un camping para estar en la naturaleza, y no está mal, pero está orientado a actividades en el campo, y eso si, es muy tranquilo. Por las noches apenas se oye nada, y es todo paz. Nosotros estamos acostumbrados a campings donde, aunque tengas que coger el coche y hacer unos pocos kilómetros para ir a un super grande (Continente, InterMarché, Pingo Doce...), todo está relativamente a la mano. Aquí, una vez que dan las 10 de la noche, solo te queda estar en la tienda, ya que el restaurante cierra a las 20:30.
👍 LO MEJOR DEL CAMPING:

• Las instalaciones son muy nuevas.
• Si te gusta la naturaleza, estás de enhorabuena.

👎 LO PEOR DEL CAMPING:

• El acceso a las parcelas, por un camino de cabras empinado.
• Las parcelas, por lo menos la nuestra, no estaba nivelada y era bastante justa de espacio.
• Está donde no vuelve ni el eco.
• Lo considero caro si lo comparo con el resto en que hemos estado.

📷 QUE HACER POR LOS ALREDEDORES:

• Nada, aquí a pie, lo único que puedes hacer es rutas de senderismo, que imagino que las habrá. El super mas cercano estará como a 12 km. 
• Eso si, dispone de piscina, que hay que pagar aparte por si quieres darte un chapuzón.

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