Gestionar el tiempo no es fácil, pero es sencillo, al igual que hacer un presupuesto financiero. Mucha gente me dice a diario que no tiene tiempo de hacer lo que realmente desea. De hecho, yo me quejo de lo mismo. Sin embargo, a lo largo de los años, he aprendido a priorizar las cosas que me resultan importantes y saco el tiempo para hacerlas. Esto es sobre todo practicar algún deporte y escribir libros, cosa que hago además de mi trabajo como escritora y traductora free-lance. Criar a mis hijas es algo que combino con todo.
Mi “secreto” para conseguir hacer las cosas que me resultan importantes es que no veo televisión. No quiero decir que apenas veo televisión, sino que no la miro en absoluto. Mis hijas tampoco, lo cual las ha convertido en excelentes lectoras. Si quiero ver las noticias, las leo en Internet y si quiero ver una película, alquilo un DVD, cosa rara.
A quienes se quejan de que no tienen tiempo para escribir un libro, dedicarse a una afición o ir al gimnasio, mi primera pregunta sería: ¿cuántas horas de ver televisión estás dispuesto a sacrificar?
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