De aquí a finales de mes me encuentro en la recta final de la carrera, a tan sólo cuatro vallas para alcanzar la meta. Ése es el motivo por el que quizás no me prodigue demasiado por el blog durante algún tiempo. Quiero superar de una vez los obstáculos y rozar la cinta de llegada. Me va mucho en ello.
Espero que comprendáis que en estos momentos no tengo la cabeza en condiciones como para escribir a diario, más bien está supeditada a que la imperiosidad de una idea me obligue a ello y tenga que aparcarlo todo para concretarla. Ojalá que no me suceda muy a menudo, no me gusta dejar las cosas a medias y procrastinar es una de las formas de conseguirlo de una manera rápida y eficaz. Pero si ocurre, eso que os encontráis.
Cuento con vuestra paciencia y vuestro apoyo. A mi regreso, una vez cumplido el objetivo, igual podemos hablar de proyectos nuevos e ilusiones a realizar. No será nada fácil, pero por ganas no va a quedar.
Gracias por vuestra comprensión.