De la ingenuidad también se sale

Como hoy es viernes 13, les voy a recomendar, a la americana, una película de terror. Sydney Sweeney y el siempre efectivo Álvaro Morte, protagonizan Immaculate, una cinta que, a priori, podría parecer un entretenimiento sin mucho más que aportar. Nada nuevo en el infierno, con un convento donde las monjas no parecen ser tan cándidas, el clero no es de fiar y Satanás parece rondar por todas partes. Sweeney es una joven novicia que sufrió un accidente de pequeña que casi la hace ver el túnel al otro mundo y que decide buscar el sentido de su vida y casarse con Dios. De rostro angelical, su ingenuidad y dulzura es hasta empalagosa. Llegados a este punto, ¿por qué les recomiendo esta película si les gusta el género del terror? Pues porque de todos los estereotipos planteados, el guion da un giro total que convierte a la protagonista típica de tantas películas del género en algo totalmente diferente, en una mujer que no va a permitir que todos los espectadores sepan cuando la van a atacar menos ella. Como personaje femenino de terror grita, sí, y mucho, pero decide que del final ya se encarga ella. Y sólo por eso, merece disfrutar de un mal rato semejante.