Giorgio Armani es un auténtico dandy. Siempre elegante y chic aunque vista una simple camiseta de algodón y un pantalón de pinzas. Siempre de negro o blanco pero siempre monocromático e indiscutiblemente correcto.
Los amantes de la decoración de “autor” pueden recrear en su casa la elegancia y la sobriedad de los trajes Armani con una línea de mobiliario que destaca por sus formas depuradas.
En la división de Armani para el hogar , creada en el año 2000, no hay lugar para la sorpresa, la colección responde al más puro “espíritu Armani” y nos da las herramientas para crear un espacio íntimo, contemporáneo y chic.
Su estilo decorativo, al igual que el personal y el de su colección de moda, es sereno, equilibrado e impecable bajo la premisa de “menos es más”.
Predominan las líneas puras, las maderas nobles, los lacados negros, la piel, las sedas y las tapicerías blancas.
En su nueva colección se evidencia la importancia de la naturaleza como fuente de inspiración, lo que explica la incorporación de materiales ecológicos y naturales como el tamo, el platanero rayado, las cáscaras de coco o conchas de mar, y objetos que recuperan arte y artesanías ancestrales, desde lo sencillos kilims nepalíes al exquisito cristal de Murano.
¿Te haces con un Armani para el salón?
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