Revista Política
Felipe VI es el actual Rey de España. Ése es su principal título y el que le otorga, además, la Jefatura del Estado. Además tiene otros, heredados de la Historia: es Rey de Castilla, de León, de Aragón, de las Dos Sicilias, de Jerusalén, de Portugal, de Navarra, de Granada, de Toledo, de Valencia, de Galicia, de Mallorca, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdoba, de Córcega, de Murcia, de Jaén, del Algarve, de Algeciras, de Gibraltar, de las Islas Canarias, de las Indias Orientales y Occidentales, y de las Islas y Tierra Firme del Mar Oceáno. También es Archiduque de Austria, Duque de Borgoña y de Brabante, de Milán, de Atenas y de Neopatria. Conde de Habsburgo, de Flandes, del Tirol, de Barcelona, del Rosellón y de la Cerdaña. Marqués de Oristano y Gociano. Señor de Vizcaya y de Molina. Rey de Hungría, Dalmacia y Croacia. Duque de Limburgo, Lotaringia, Luxemburgo, Güeldres, Estiria, Carniola, Carintia y Württemberg. Landgrave de Alsacia. Príncipe de Suabia. Conde Palatino de Borgoña. Conde de Artois, Hainaut, Namur, Gorizia, Ferrete y Kyburgo. Margrave del Sacro Imperio Romano y Burgau. Señor de Salins, Malinas, la Marca Eslovena, Pordenone y Trípoli.
Aparte de todos estos títulos también podría considerarse Emperador de Roma (los derechos pasaron a los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, de manos de Andrés Paleólogo, sobrino del último emperador, Constantino XI) y (algo que no he visto en ninguna parte) también podría considerarse heredero de los reinos conquistados por Roma: Faraón de Egipto, Rey de Macedonia, Rey de Epiro, Rey Seleúcida, Rey de Pérgamo...
En la persona del Rey vemos, hecha carne y sangre, la Historia.