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Ajinai - Mongolia: Tahoeicha, Hugejitu, Wenbo Zhang y ZhiwelliLengua mongol.· Tonolec – Argentina:Charo Bogarín y Diego Pérez Lengua Q’om guaraní y español.· Rasmus Lyberth – Groenlandiaacompañado por Ulrik Skytte Andersen Lengua Inuit Kalaallisut.· Zak Tzevul –México (Chiapas)Damián Martínez, Enrique Martínez y Romeo RamosLengua Tzotzil.· Uchpa – PerúFredy Ortiz, Marcos Maizel, Julio Valladares, Ricardo Montero, Aldo Malpartida, Cristian Gamboa y Fidencio Huamani danzante de tijerasLengua quechua.· Venado Azul – México (Jalisco) José López, Yuawi López, Juan Carlos González, Claudia Carrillo y Elías Valdés.Lengua wixarika.· Tzontzonalli – MéxicoRubén Albarrán, Leo Heiblum, Poncho Figueroa, Joel Cruz y Ofelia MedinaDe Mongolia a la Patagonia. Un origen, muchas lenguas, convirtió a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en una Torre de Babel musical. Una torre con vistas panorámicas a las estepas y desiertos de Mongolia al oriente, si escucha con atención alcanzará a percibir el sonido gutural de sus volcanes extintos. En el norte de la torre predominan los bellos glaciares agonizantes de Groenlandia, que con coros ancestrales claman por su salvación. Al sur las cordilleras andinas rugen con el poder de la roca que da cimiento a Machu Picchu, y la selva guaraní se vuelve poesía verde y fuerza de cascada. Desde lo más alto se puede ver México y los cientos de kilómetros de la ruta sagrada del pueblo Wixarika (huichol). Wirikuta grita, en sus ecos repite incansable que no se vende, mientras en la profundidad de las grutas en Sots’leb los murciélagos responden a su llamado en lengua tzotzil.Un concierto, un ritual sagrado, una oda a la Madre Tierra. Lenguas que se hacen una, y se hacen muchas para dejar muestra de su poder. Literatura ancestral que protesta cantando, no porque se nieguea morir, sino porque espera su renacer. Uno de los mejores espectáculos que ha dado Ofelia Medina y Cultura U. de G. para la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.Revista Cultura y Ocio
Un origen, muchas lenguasLa Feria Internacional del Libro de Guadalajara cumple 30 años, para la señora Ofelia Medina era imperdonable no participar en esta celebración. Su presencia en esta feria siempre ha dejado huella, sus bellos y variados homenajes a la lengua han tomado forma de poesía, de teatro, música y danza.Con América Latina como invitado de honor y en el marco del “Primer encuentro de literaturas en lenguas originales de América”, Ofelia Medina y el músico Leo Heiblum diseñaron un proyecto para demostrar que la literatura no es la única manifestación de la vitalidad de las lenguas, las lenguas se hablan y escriben, pero también se cantan.Un concierto que no sólo celebra las lenguas originales de Latinoamérica, ya que en la actualidad hay más de 600 lenguas que no son latinas, pero son originarias y están vivas. No son lenguas del pasado como muchos pudieran pensar, para Ofelia Medina las lenguas son el futuro de la humanidad, porque son la colectividad representada en la lengua. Junto con las diferentes lenguas originales vienen las comunidades indígenas que las hablan y las defienden, así como defienden el respeto a la Madre Tierra.“Este concierto es una oda a la Madre Tierra y al cuidado que tienen de ella las comunidades indígenas, porque es gracias a ellas que la Madre Tierra no está más explotada. Este concierto trae las lenguas vivas de América, las lenguas que luchan, lenguas que aman y protestan y lo hacen con alegría, con fuerza y chingonería”.Siete grupos de rock y música contemporánea en lenguas se unieron al ritual por la vida.