De novenas, abandonos y fracasos

El castrismo sólo puede vanagloriarse de haber hundido a Cuba en la miseria.

Al momento de escribir esta nota me llega la noticia de que ha abandonado la selección sub 23 de baseball del equipo Cuba uno de sus deportistas. Y hago la aclaración porque aún faltan algunas horas para el regreso de la Selección (o lo que quede de ella) a Cuba, y en ese lapsus de tiempo cualquier cosa puede pasar. 

La noticia en sí no tendría nada de particular estando todos acostumbrados a que con frecuencia algún que otro deportista o integrante de alguna “brigada médica” pida asilo en el país donde se encuentra.  Lo noticioso esta vez es que este es el 9no. integrante que abandona el equipo.  Equipo que, para ser conformado, además de las aptitudes deportivas requeridas, sus integrantes deben mostrar señales claras de “patriotismo” y apego pleno al gobierno. 

Los actuales nueve abandonos constituyen el peor fracaso del régimen en términos ideológicos en tanto son los jóvenes quienes han protagonizado la mayor deserción de la historia castrista. Han sido ellos, los nacidos y criados dentro del sistema y llamados a defender la “Revolución, los esperados Hombres Nuevos los que le han dado una bofetada al régimen con su actitud.

Pero no sólo es un fracaso ideológico. Es un fracaso en lo que a seguridad respecta. 

Por todos es sabido que en cada delegación cubana que viaja al extranjero hay varios encargados de “cuidar” al personal. Dicho de otro modo, están a cargo de la vigilancia del equipo para evitar que alguien abandone la misión.  Y ese protocolo, ese sistema, la gente a cargo, falló. Falló por completo. Incluso después de apelar al método clásico de aislar al equipo (como han tratado de hacer con el pueblo en la isla;  es lo que mejor saben hacer), falló. 

Y es por eso que, con toda mi buena intención, le sugiero a los encargados de vigilar al equipo de pelota sub-23 en México:  Quédense. Abandonen ustedes también. No regresen a Cuba con el peso del fracaso profesional. Las consecuencias son duras y ustedes las conocen.

Al momento de escribir esta nota, sostengo que el castrismo sólo puede vanagloriarse de haber arruinado al país. En todo lo demás, ha fallado.

Rudy Felix

2 de Septiembre de 2021