Nació en Bretaña (llamada Armórica en su tiempo), a finales del siglo V. Sobre 507 se estableció como ermitaño en una isla rocosa frente a la costa. Pronto tuvo varios discípulos y fundó un recinto monástico muy austero. Es el origen de la ciudad de St-Malo, la cual aunque lleva el nombre de otro santo, tiene en realidad a Aarón como fundador.
Dícese que cuando San Malo (15 de noviembre y 11 de julio) fue avisado por un ángel de que había sido elegido obispo de Aleth, pidió consejo a nuestro santo, el cual le encomendó y bendijo para que ejerciera su labor eficazmente. El santo obedeció y tomó la sede, siendo un magnífico pastor, reformando la Iglesia y fundando varios monasterios para la evangelización de la región. Pero esto es legendario, pues Malo vivió lo menos 100 años después de Aarón.
Aarón murió sobre 530 y fue sepultado en la catedral, donde fue venerado durante siglos, hasta que en el marco de la Revolución Francesa se profanaron y desaparecieron sus reliquias.
Fuentes:
A 22 de junio además se celebra a:
San Albano, mártir.
San Acacio
y comp. mártires.
Santa Cristina de
Bretaña, virgen.