Respuesta: Gracias por tu amable pregunta, espero poder ayudarte y responder a tu "asalto". como ves, este es un blog que a ello se dedica, a ser "asaltado". Vamos con la primera imagen:
La identificas con San Antonio de Padua, pero como dices, faltan sus atributos característicos, a saber, la azucela o lirio, y el típico libro. Y no estabas lejos porque igualmente es un santo franciscano, y en una escena que también vemos frecuentemente de San Antonio de Padua (13 de junio): La Virgen María le entrega al Niño Jesús para que el santo tenga en él sus delicias místicas. Pero aquí se trata de
San Félix de Cantalicio, religioso capuchino. 18 de mayo.
Nació en 1513 en Cantalicio, población de la Umbría, tierra de santos donde las haya, de padres pobres y buenos cristianos. muy niño fue dedicado al pastoreo, tiempo que, como se lee de otros santos, aprovechaba para hacer sus oraciones, aprender de memoria en catecismo y rememorar las leyendas de santos que escucha, pues no sabe leer. Estas vidas de santos le lleva a aspirar a la radicalidad evangélica, como los penitentes de la Tebaida, y entiende que en los frailes capuchinos hallará lo que busca. Y allí se va, al convento de Ciudad Ducale, donde le ponen a prueba, presentándole un crucifijo, como norma de vida. Su respuesta: abrazarlo. Tomó el hábito en Áscoli, y fue enviado posteriormente a Roma como hermano limosnero.
Era muy penitente, siempre tenía la mirada en el cielo y el rosario en las manos. Ayunaba constantemente, dormía en unas tablas, comía lo que los hermanos dejaban. No hablaba sin necesidad y aunque tenía trato constante con personas adineradas, que le daban sus limosnas, jamás tomaba parte de sus reuniones, ni entraba a sus casas, ni aceptaba los criados de estos le ayudaran. Fue amigo de San Carlos Borromeo (4 de noviembre), al que daba algunos consejos, soo porque se lo pidieron, sobre la reforma eclesiástica llevada a cabo por el Borromeo. También fue amigo de San Felipe Neri (26 de mayo), con el que bromeaba emulando en los deseos de padecer por Cristo, deseándose uno a otro los más terribles tormentos y padecimientos para merecer ante Cristo.Y es que era un santo cariñoso, jovial, al que los niños querían, y siempre tenía para ellos estampas o regalillos, que aprovechaba para enseñarles la doctrina, cancioncillas piadosas, llevarles a una iglesia, etc. Varios portentos realizó, como sanar a un fraile moribundo, o descubrir una moneda que alguien había metido en la limosna, porque el morralillo que llevaba siempre, le pesaba inconmesurablemente, pues solo limosna de pan u otros alimentos aceptaba. Nunca dinero.
San Félix que se venera en
El Raval de Castellón de la Plana
En 1587 las fuerzas decidieron abandonarle, y poco a poco fue cayendo enfermo. En mayo de ese año tiene varios éxtasis en los que ve su próximo fin. El día 18 ve a Nuestra Señora, que viene a llevarlo al cielo, lo dice a los frailes, y dulcemente muere, sin agonizar ni padecer, a los 74 años. Sixto V, con el que también había tenido amistad, quiso beatificarlo, aunque lo haría Pablo V. en 1712 sería canonizado por Clemente XI. Es el primer santo de la orden franciscana capuchina. El primero de una serie de hermanos no sacerdotes en alcanzar los altares.
Iconografía.
Es reconocible por dos elementos fundamentales: El primero es la edad, pues siempre aparece como un anciano, lo contrario a San Antonio de Padua, que murió joven. A San Félix le veremos siempre con una larga barba blanca, que por otro lado, es típicamente capuchina. Otro atributo es el morralillo de la limosna, que lleva a un hombro, o a los pies. Y otro atributo que no suele faltar es el Niño Jesús, ya sea acunándolo o llevándolo en un brazo. También hay que tener en cuenta que el hábito franciscano capuchino es diferente al de los franciscanos menores o franciscanos conventuales, no tiene esclavina y la capucha es más larga.
Y la segunda pregunta:
Como bien dices, uno de estos santos es San Andrés Apóstol. El primero a nuestra izquierda, y es reconocible perfectamente por la cruz aspada, o cruz de San Andrés.
Primero vamos al conjunto:
Parecen formar parte de una serie, y una serie de apóstoles, aunque alguno parezca llevar casulla, como el mismo San Andrés, no lo es en realidad. Visten túnica y manto. Como los apóstoles son 12, lo tengo difícil al no ver la serie completa, pero algo se podrá hacer. Vamos primero con el más fácil: el santo de la espada que, y no hay que dudarlo, es San Pablo Apóstol, con sus atributos característicos: la espada y el libro de la Escritura, que, como vemos, llevan los demás. Otra cosa que ayuda a identificarle es la barba, que en San Pablo, en el 99,9% de las representaciones es oscura y más larga que la media.
Sobre el segundo, siempre por nuestra izquierda, tengo que aventurarme, sin pretender ser tajante. Lo único que podría identificarle es esa espada corta que me recuerda a San Bartolomé (24 de agosto), que es el otro apóstol que se presenta con instrumento cortante. San Simón también, pero con sierra, y esto no lo es. En contra, San Bartolomé lleva siempre claramente un cuchillo, y esto tampoco lo es. Decapitados, si eso nos quieren decir, también murió Santiago, pero no creo presentaran a Santiago sin algo más alusivo, como el bordón o la concha. La verdad es que yo le llamaría San Bartolomé con dudas.
El último, también último en la fotografía, me desconcierta del todo y no me atrevo a decir nada. Los apóstoles, aunque celebrados como mártires, incluso San Juan que no lo fue, nunca suelen llevar la palma de martirio, porque no es necesario ponérsela: todos sabemos que fueron mártires, y tienen otros atributos que los hacen reconocibles. Es decir que, aunque todos podrían llevar la palma, no la llevan. Así que este apóstol se me queda fuera de ser reconocible al no tener ningún atributo propio.
Todo esto, claro, pensando que son una serie de santos apóstoles, aunque si no lo son,tampoco importa mucho: igualmente portan atributos muy genéricos y podrían ser cualquier santo mártir antiguo.