Revista Viajes

DE VIAJE POR LA COSTA VASCA. De Muskiz a Bermeo.

Por Jmbeltran @Beltran_JoseM

Como si de un escultor se tratase, el mar moldea todos los rincones de la Costa Vasca

DE VIAJE POR LA COSTA VASCA. De Muskiz a Bermeo.

Plentzia 

Desde la playa de La Arena, en Muskiz, la más occidental de Bizkaia; hasta su extremo más oriental, Hondarribia, en plena desembocadura del Bidasoa, que marca la frontera natural entre España y Francia, pasarán ocho largos días que esperemos nos hagan disfrutar de este recorrido, largamente esperado por nosotros, no solo por los maravillosos paisajes sino, también, porque haremos parada y fonda en establecimientos con encanto donde reposaremos y, a buen seguro, repostaremos.
Cronológicamente no será este el orden estricto de nuestro recorrido si bien ahora, a modo de prólogo, he preferido que el lector se encuentre más cómodo con una visión de occidente a oriente; de Muskiz a Hondarribia y que iremos desarrollando en siguientes artículos.
De Muskiz a Bermeo.

DE VIAJE POR LA COSTA VASCA. De Muskiz a Bermeo.

Santurtzi 

Muskiz y Zierbena, que comparten la playa de La Arena, se encuentran en el punto más occidental de la provincia de Bizkaia. Desde el mismo paseo marítimo de Itsaslur, donde todavía quedan restos de la reciente actividad minera, observaremos sus marismas y dunas al igual que la ermita de Nuestra Señora del Socorro enclavada en una isla unida a tierra, como otras muchas que se desprenden de la costa. Ya en Zierbena, la ascensión hasta lo alto de Punta Lucero nos mostrará restos defensivos de diferentes conflictos bélicos, desde la Guerra de Secesión hasta la Guerra Civil. Camino de Santurzi, y aunque no sean de temporada será obligada la parada para degustar sus sardinas, visitaremos el Agurtza, un antiguo barco pesquero reconvertido en Centro deIinterpretación de la Pesca.

DE VIAJE POR LA COSTA VASCA. De Muskiz a Bermeo.

Puente Vizcaya. Portugalete.

Ya muy cerca de Bilbao, la ruta nos conducirá a la desembocadura del Nervión. Portugalete, la margen izquierda de la ría, es el corazón de la zona industrial y que el museo Rialia evoca para su mejor recuerdo. Recorreremos sus calles medievales en pendiente en perfecta armonía con su zona ribereña, en la que predominan las casas de estilo británico. Enfrente, Getxo, unido gracias al Puente Vizcaya y su famosa pasarela donde, en Las Arenas, desembarcan las barcazas aptas para vehículos y peatones. La prosperidad de la época industrial será visible en los palacetes que conforman Neguri, sobre el mismo paseo marítimo que llega hasta el Puerto Viejo de Algorta.
Salimos de Getxo, hacia el norte. Punta Galea es un amplio espacio natural donde el verde muere en los espectaculares acantilados agredidos por el mar. Procuraremos disfrutar de ellos, sea a pie o en bicicleta, tomando un sendero que recorre esta franja del litoral.
Camino de Plentzia, dejando atrás Sopelana y Barrika, podremos observar los meandros de su ría navegable y de su arquitectura típica marinera. Es de esperar que el Cantábrico muestre su cara más indómita cerca del faro de Gorliz para seguir hasta Armintza y admirar su bello puerto. Más adelante, los viñedos instalados en las faldas de las montañas nos darán un claro aviso que nos acercamos a Bakio. Es aquí, y en su museo Txakoligune, donde se concentra la mayor parte de la producción del txakoli, bajo denominación de origen. Es aquí, además, donde se encuentra la mayor playa de Bizkaia y lugar apreciado para los amantes de los deportes náuticos.

DE VIAJE POR LA COSTA VASCA. De Muskiz a Bermeo.

San Juan de Gaztelugatxe.

Bermeo nos espera como final de esta primera parte del recorrido. Sin embargo, en este corto trayecto se concentran dos de los iconos más representativos de su litoral: San Juan de Gaztelugatxe, el islote unido a tierra firme con su inseparable Isla de Aketxe y el punto más septentrional de Euskadi, el Cabo de Matxitxako. Llegamos a Bermeo, uno de los pueblos más emblemáticos de Euskadi, donde nos espera la medieval Torre Ercilla, de piedra pura y ocre y donde se ubica el Museo del Pescador. En su puerto se encuentra amarrado el Aita Guria, recreación de un ballenero del siglo XVII.
Como veis hemos realizado un salto con Bilbao. No os preocupéis, la capital merece un capítulo especial. Eso sí, ya os adelanto que el siguiente tramo será de Bermeo a Mutriku. De momento, como siempre, desearos salud, ciudadanos viajeros.

Volver a la Portada de Logo Paperblog