Se queda fatal decirlo, pero por fin se han acabado las fiestas. Es mas yo creo que necesito un par de días de fiesta para recuperarnos de las fiestas...jajajaHablando a nivel laboral, la campaña navideña ha ido perfecta no podemos quejarnos pero a nivel psicológico se necesita descansar un día como mínimo a la semana para no volverte loco, sobretodo si trabajas cara al público. Supongo que ahora nos podremos relajar un poco. Me sabe fatal por los críos porque al trabajar nosotros a ellos no les ha quedado otra que echar una mano, ademas hacían falta así que muchas vacaciones no han tenido aunque ya están un poco acostumbrados y tampoco se han quejado en demasía. Estas fotos son del día 31, yo quería salir a correr acabar el año como solemos hacerlo hace ya unos años, con la típica cursa dels Nassos.Pero este año nos comíamos las uvas en la mountain, en Cànoves, en la torre donde subimos los fines de semana y claro íbamos justos de tiempo. Después pensé correr alguna por allí arriba, cada pueblo tiene su San Silvestre y en el de al lado se corría una. Pero Iván tenía razón, llevaba todo el mes trabajando 12 horas y todos los domingos y lo que no quería era tener que ir estresado para arriba y para abajo también el día 31. Si lo que quería era correr no necesitaba una carrera sino calzarme unas bambas.
Así que una vez estábamos en la torre y habíamos preparado la mesa debidamente adornada con sus copas, sus velas, sus bolsas de cotillón para cada uno.... Nos cambiamos de ropa y nos fuimos a correr, había que hacer algo especial así que subimos a la Ermita de San Salvador, para nosotros y mas para Iván es un lugar mítico, no es que seamos creyentes de ir cada domingo a misa pero en esos momentos de.. Dios mío échame una mano, sobretodo con temas de salud es aquí donde acudimos, además esta bastante arriba y hay unas vistas fantásticas.
Sin quererlo llegamos cuando el sol se estaba poniendo y que queréis que os diga, esto es terminar bien el año y lo demás son tonterías.
Al llegar leía las críticas de los que habían corrido la Cursa dels Nassos quejandose de lo mala que era la camiseta y que habían tenido que ir a buscarla a la otra punta de Barcelona. Lo que me lleva a preguntarme ¿la gente corre por acabar el año corriendo o por la camiseta?
Al bajar se nos hizo de noche pero Iván llevaba frontal, así que sin problemas. LLegamos a casa con una sonrisa de oreja a oreja, que poco cuesta ser feliz. Nos duchamos, nos vestimos de gala y a celebrar el fin de año, que nos lo habíamos ganado...