Con el estreno de “The Walking Dead” hace pocas semanas, parece haber vuelto (con todo) el género zombie, aunque a diferencia de lo que muchos piensan, la serie norteamericana no es la primera en llevar a estas criaturas semanalmente a la pantalla chica. Un caso que pasó relativamente desapercibido en nuestras latitudes, pero merece mucha atención, es la breve serie “Dead Set”, de origen inglés.
En apenas cinco episodios, se nos presenta esta sangrienta historia de otro apocalipsis zombie, aunque con interesantes variantes. El primer elemento a tener en cuenta es la locación: la Casa de Gran Hermano. La serie cuenta la historia de un Londres atestado de plaga zombie y donde el único lugar seguro es la casita del reality. El problema es, claro, qué ocurre cuando los últimos sobrevivientes de la humanidad son una pandilla de chicos descerebrados y productores de TV estresados. Lejos de ser una comedia, Dead Set es un drama con mucho suspenso bien logrado donde al espectador no le queda claro quién merece el tiro en la cabeza.
Los sobrevivientes son, principalmente, los participantes del reality (con todos los clichés necesarios en un producto de esas características), algunos productores del programa, top models y gente rica a montones. Hay apenas un par de personas con algunas neuronas y el absurdo experimento social se convierte en una historia sumamente atrapante.
Por un lado, el aislamiento de los “valientes” de GH que no tienen idea de lo que ocurre afuera. Por el otro, los pocos humanos que sobreviven a los comecerebros y descubren que la casa del reality es posiblemente el único sitio seguro. Dead Set se emitió durante cinco noches consecutivas en enero de 2008 y fue creada por el escritor Charlie Brooker.
Lo interesante también, es que la serie no contaba con un enorme presupuesto, asi que debió utilizarse más maña que euros. La cantidad de extras fue menor a la que se necesitaba debido a que los lentes de contacto que usaban los zombies eran demasiado costosos, pero tras algunos trucos de filmación y un buen montaje, no se nota la falta de muertos vivos. También se usaron escenas de archivo del verdadero reality, tal es el caso de la gala de expulsión que puede verse en el primer episodio. Los efectos especiales también debieron estar muy controlados y sin que se desperdiciara ni un centavo, el efecto fue más que realista. Mucha tripa y mucha gente corriendo por su vida. Dos elementos que no necesitan de tanto dinero como el que se cree, sino de un par de buenas cabezas armando la historia.
Actualmente la serie es emitida por I-Sat