Se acabó el debate del “paro, sanidad y 1.992” que lleva establecido
desde hace un par de legislaturas con estos dos partidos que polarizan el poder
en España como invitados a la mesa; por fin ha terminado y nos ha costado a los españolitos 500.000€, que se dice rápido. Ahora hay que ver lo que opinan los contertulios de los programas posteriores de este tan esperado debate.
Como tantos otros, yo he visto el debate pero con la
convicción en mi caso de que estaba perdiendo el tiempo y es justo decir que me ha sorprendido, pensaba que sería nefasto y me ha parecido un buen programa de humor. Al parecer, para Rubalcaba y Rajoy, la palabra debate significa “vomitar
el programa de uno menospreciando el programa de enfrente, sin posibilidad de réplica
y sin una sola pregunta fuera del guión previamente marcado”, claro que viene a
ser lo mismo que lo que ellos entienden por rueda de prensa.
No sabría decir quien ha ganado, nunca lo he visto claro. Lo que he sacado en claro es que Rubalcaba se había leído el programa del PP, además de saberse de memoria el suyo y en cambio, Rajoy no tenía ni pajolera idea de lo que pone su programa y se ha centrado en negarlo todo.
Más alla de la valoración final del debate que repito, vuelvo a decir que me ha sorprendido gratamente pues esperaba algo mucho más atado, siempre me pregunto una cosa, para qué carajo sirve este esperpento televisivo? Me recuerda
a los mítines electorales, en los cuales los partidos se gastan montones de
dinero para concentrar en un pabellón o una plaza de toros a los mismos que ya
saben que les van a votar. Quiero decir con esto, que no me imagino a un
indeciso entrando a un mitin del #PPSOE para ver si les convencen, de verdad,
no lo veo. Entonces, para qué narices gastarse ese dinero, endeudar más al
partido y por consecuencia, hipotecar su libertad de acción contra los bancos?
Lo que más me incomoda es que con bazofias de este tipo, nos
escenifican el bipartidismo que reina y que por su puesto, quieren que siga
reinando en España. No podemos tildar de debate decisivo y plural, aquel que
elude invitar de forma consciente al resto de fuerzas políticas. Y con esto no
quiero decir que llamen a ocupar una silla a todos los partidos que se
presentan a unas elecciones pues sería imposible, pero al menos si deberían de reunir entorno a la mesa a
las fuerzas políticas más fuertes después del bipartido. Simplemente crítico la
merma de libertad de expresión, pluralidad, representatividad y democracia por
tanto, que se hace patente con este tipo de “debates”.
Los dos señoritos, se han pasado cerca de hora y media
cacareando, el uno (Rajoy) se ha pasado todo el debate recordando el paro, hasta utilizarlo para hablar de pensiones, sanidad o educación; y el otro ha demostrado que lo tenía todo muy preparado, pero que lo tenía tan difícil que era casi imposible que saliera victorioso. Que si con nosotros llegará el cambio, que si yo se lo que
hay que hacer para salir de la crisis, que si gasolineras, que si trajes, que si paro, que si impuestos...
Hágannos
un favor y háganselo ustedes mismos, en las próximas elecciones ahórrennos el
mal trago de hacernos ver este “Sálvame político” anunciado como
#eldebatedecisivo.
Y les doy un consejo, ordenen su corralito antes de sacar
mierda del corral del vecino, que ninguno está para echar cohetes y les irá
mejor.
Buenas noches y buena suerte!