Diariamente nos bombardean con el mensaje de que es bueno tomar múltiples suplementos vitamínicos orales: pastillas para mejorar la piel, el pelo, para tomar el sol, para no envejecer, para la celulitis, etc. En fin, que está claro que hay un verdadero auge de la “nutricosmética oral”.
¿Pero realmente funciona? Y otra pregunta que no me parece descabellada, ¿puede ser peligrosa?
Acaban de publicarse tres artículos que parecen definitivos en la prestigiosa revista científica Annals of Internal Medicine que demuestran que estos suplementos no son eficaces. El título de la editorial de la revista es claro: “Enough Is Enough: Stop Wasting Money on Vitamin and Mineral Supplements”, es decir, “Ya basta: deja de gastar dinero en vitaminas y suplementos minerales”.
Los autores de esta editorial destacan que la toma no controlada de betacarotenos, vitamina A y vitamina E puede producir riesgos para la salud. Además los autores demuestran que la toma de antioxidantes, acido fólico y vitamina B no previene ninguna enfermedad crónica tipo enfermedad coronaria, enfermedades neurológicas ni el cáncer. Y también demuestran en un estudio, que la toma de suplementos vitamínicos no mejora el deterioro intelectual en varones de más de 65 años seguidos durante 11 años.
Los autores destacan de la importancia de una buena dieta para prevenir estas enfermedades crónicas, pero desaconsejan la toma indiscriminada de suplementos vitamínicos y minerales. Por otro lado destacan la importancia de tomar acido fólico en las embarazadas, y la toma de vitamina D en casos específicos de niveles bajos de la misma.
¿Qué es lo que yo recomiendo a mis pacientes en relación a estos suplementos? Cada vez hay más estudios que demuestran que no es bueno tomar de forma indiscriminada suplementos vitamínicos y minerales. Lo mejor es una buena dieta, donde el verdadero enemigo no sea tanto la grasa sino el azúcar, con mucha fruta y vegetales. Pero como no todos podemos hacer una dieta perfecta en determinados casos parece interesante tomar algún complejo multivitamínico a DOSIS BAJAS. No recomendamos colágeno ni ácido hialurónico oral ya que no está demostrado que mejore la piel por esta vía, ni tomar antioxidantes a dosis altas ya que cada vez parece más claro que es bueno entrenar nuestro cuerpo para que se oxide. En relación a la vitamina D, parece que la mejor forma de conseguirla es a través de una exposición solar diaria corta (menos de 10 minutos) y controlada, sin quemaduras y evitando la cara, ya que es la zona que más está expuesta al sol todo el año. En caso de enfermedades fotosensibles (lupus eritematoso, múltiples cánceres de piel, etc) se puede valorar la toma de fotoprotectores orales, pero no los recetamos a la población sana. Y mucho deporte, deporte intenso y variado. En resumen, hasta que no se demuestre lo contrario, dieta, deporte y sentido común.
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