Si trabajas por servicios profesionales y aceptas cheques personales como método de pago debes leer esto.
Los cheques personales están en peligro de extinción, pero hay personas que aun disfrutan de pagar sus cuentas con cheques personales. El aceptar un cheque personal como pago por un servicio puede ser una navaja de doble filo, pero hoy quiero compartirle algunos detalles a los que debes prestar atención para evitar perdida de dinero por tus servicios. Numero de ChequeMientras mayor sea el número de cheque, mayor son las probabilidades de que el cheque tenga fondos. Un número de cheque de 4 dígitos nos indica que la cuenta ha estado abierta por mucho tiempo y que se han girado una cantidad significativa de cheques de la misma. Habiendo dicho eso cuidado con los cheques #100 al #400. Adiciones al ChequeCuando un cheque personal es alterado para cambiar el número de teléfono o la dirección, eso es un indicativo que la persona que le está pagando con cheque no es estable y puede ser un indicativo que tampoco tenga estabilidad financiera. Relación Personal Es sumamente importante conocer la relación entre el dueño de la cuenta y la persona que te está entregando el cheque. Digamos que un joven te está pagando un trabajo por menos de $500 y te indica que la mamá le prestó el dinero. Red Flag!! La mayoría de las instituciones financieras ofrecen un límite de retiro diario de $500 de los cajeros automáticos. ¿Por qué un cheque y no cash o un Money Order? Siempre que haya una tercera persona de intermediaria como dueña de la cuenta debemos tener cuidado. FechaAsegúrate de revisar la fecha del cheque al momento de recibirlo. Un cheque post datado no es un buen indicio. Atento a una fecha fresca (menos de 7 días) y si no lo es, pregunta el porqué. ¿Hace sentido? Espero que estos consejos te ayuden a no ser víctima de fraude y tener que litigar en un tribunal para exigir el pago por tus servicios. ¿Sabías que la mayoría de los Bancos tienen una línea automatizada que te indica si un cheque tiene fondos? Para más consejos de finanzas, viajes, paternidad y un poco de risa… Sígueme en las redes sociales:Facebook Twiter