Muchas personas quieren cambiar la decoración de su casa, con una excusa muy romántica; el Día de San Valentín, el 14 de febrero. Para la mayoría de ellos el 14 se ha convertido en uno de los días más especiales del año.
Una de las opciones más recurrentes es decorar los espacios en color rojo, sin embargo podemos ir más allá, y utilizar toda la gama de colores existentes, puesto que el Amor es como el arco iris. Lo importante es que los elementos estén en orden, equilibrados, y de a par en lo posible.
Las aplicaciones que van desde la pintura de pared, camas, muebles, junto con complementos decorativos, como adornos, cortinas y lámparas, que dispuestas de manera ordenada, equilibrada y unificada, con el diseño integral, representan la expresión de amor, afecto y unión, viniendo a insertar esta celebración como una filosofía que cada vez se ha vuelto más profunda.