De carácter más bien masculino, en negro y de líneas rectas, son los toques femeninos, color en flores y accesorios por todo el hogar y cuadros pop, lo que equilibra este piso. Se trata de un ático de 57 m² habitables, bien distribuidos, donde la cocina y el salón comparten en un espacio diáfano, que termina en una agradable terraza donde tomar un café o un refresco disfrutando de los tejados de la ciudad.
Vía: A home 4 U