Para decorar una casa como la que os enseño hoy, que aunque tiene el fondo blanco está plagada de colores vibrantes, hay que ser además de habilidoso para combinar colores, muy valiente. Me encanta el poder de ciertos detalles grandes y pequeños para atraer la atención, la pared color mostaza de la cocina, el azul celeste de la banqueta de dos peldaños, el rojo intenso de la escalera, los detalles en naranja de un aseo… mis elecciones en casa siempre son más ‘aburridas’ blancos, marrones, negros, grises, beige…. a veces me gustaría ser más valiente con el color, al fin y al cabo, si uno se cansa suele ser una cosa de fácil solución… y vosotros ¿sois valientes? ;))
Vía: Stadshem