Preparados, listos… ya! Empieza la cuenta oficial para despedir el año. Pocos días, mucho por terminar y un batiburrillo de decoración navideña que o nos hace ir tarde en poner la casa a punto, y comprar esos detalles que vemos en webs, y fotos preciosas de instagram, o sencillamente nos avasallan y nos hacen pedir que pronto podamos recoger el espumillón. Mientras, equilibrando entre el turrón, las cenas y las reuniones, también tiene que haber espacio para la sencillez, la decoración salvaje y natural, alejada de las decoraciones estacionales y que sencillamente cautivan por irradiar comodidad.
Un lugar donde conviven atemporalidad y actualidad. Donde el estilo se combina neutral, para dejar que las pinceladas naturales le ponga un poco de color al espacio.
Para que los toques rudos y mas marcados lo tomen esas piezas con fondo y color negro, que le aportan ese toque un pelin masculino perfecto para conseguir un espacio diferente.
A mi sencillamente me encanta, porque lejos de ser ese espacio tan frío, demasiado apagado, lleva esos toques de color justos para hacerlo un hogar.
Y es que cada una de las estancias es mas especial y admirable que la anterior. Sin duda, una apuesta por el espacio, por las composiciones sobre muebles, y donde completar significa acierto.