Muchos nos hemos criado viendo series míticas de televisión, en los que adolescentes en High school, disponían de unos armarios metálicos en los que dejar, inspirar guardar sus libros. Esos elementos que hoy nos ocupan el espacio, y con los que vamos a aprender como decorar con taquillas, como sistema de almacenaje alternativo con el que darle un toque juvenil, retro o de color a los espacios.
Elementos, con los que en el algún momento hemos soñado plagar de fotografías de nuestro cantante preferido, o de esas rendijas que no dejaban descubrir lo que se escondía tras la puerta de cada una de ellas.
Esa opción inocente, tan valorada a día de hoy, tan demandada en espacios mas industriales y que sirven a la perfección como detalle de color de discordancia o como apoyo a un almacenaje cuanto menos diferente.
En su versión escolar, vamos a valorarla aun mucho mas, nada de taquillas de vestuario, o de rigurosa actualidad… si no de esas que tienen pasado e historia, y que bien podemos dejar al natural en galvanizado o como elemento con explosión de color.
Si encuentras taquillas pueden convertirse en la opción perfecta para decorar cualquier espacio de trabajo, salón, o dormitorio infantil. Decorar con taquillas le aportara un aire industrial, desenfadado y discordante con el que captar la atención de aquellos que quieran admirarlos.
Hoy en este creativo espacio de trabajo vamos a ver como su toque rosa intenso, le aporta ademas un aire dinámico y divertido con el que sorprender y captar nuestra atención.
Una forma de aportar ese toque juvenil y nostálgico, ahora si…permitiéndonos dejar y plagar su puerta con fotos, frases y posters de quinceañeras.
¿Te atreves a ponerlas en tu decoración?