Decorar galerías y balcones es a estas alturas del verano casi es una obviedad, y es que ya sea de ciudad o de pueblo, disfrutar de esos desayunos al fresco o de las cenas y almuerzos con la caída del sol, son todo un lujo. Quizás si no lo tienes… no lo necesitas, pero es cierto que una vez lo pruebas… no sabrías vivir sin esto.
Nosotros no tuvimos esto hasta hace tan solo 2 años cuando compramos nuestra casa, y aunque queríamos y vislumbrábamos pasar mucho tiempo en la terraza, es cierto que si la tienes acomodada y decorada, la disfrutas mucho mas.
Esto es lo que nos hemos encontrado en la galería de este fantástico piso. Un espacio plagado de luz, y que da servicio y conexión a algunas estancias de la casa, una imagen muy normal en los edificios de arquitectura de los 70 que encontramos en nuestras ciudades.
Eso si, ademas de ponerle este toque decorativo y creativo en la galería, lleno de comodidad, color y luz, podemos ver como este apartamento se destaca por la sobriedad y elegancia con la que el gris, como bien decimos muchas veces, se encarga de darle seriedad y destacar los elementos.
Un color intenso que nos muestra un lugar nórdico, pero que permite esa mezcla vintage y donde el miedo a la mezcla y a lo atemporal no existe.
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