Revista Mundo animal
Déjale ser perro. Sí, en serio. Déjale ser perro. Por tu propio bien, por el de tu familia y por el propio bien del perro, no lo trates como a un ser humano y déjale ser perro. Recuerda que es una nariz con patas. Tu perro principalmente conoce el mundo y lo interpreta con la información que le llega por la nariz. Tú lo conoces por la vista, pero tu can por la nariz. Déjale olfatear. Si no, estará desubicado y estresado, cada vez más. Es muy importante pasear con tu perro, sin prisa. Sin tirones. Permitiendo que olisquee aquí y allá. LLeva una correa larga que te permita tenerle bajo control, pero a su vez que le de libertad de movimientos y sin que tenga la sensación de estar sujeto a una máquina de tortura que le impide manejarse a sus anchas. Si las guerras no son buenas, entrar en una de tirones cada vez que estéis en la calle, tampoco. Conseguir un paseo de media hora, sin prisas, y permitiendo olisquear, no nos es sencillo muchas veces. Nosotros vamos con reloj. Nuestro perro no. Pero de vez en cuando tenemos que conseguirlo. Y ya que queremos dejarle ser perro, no le pongamos ropitas encima. No digo yo que en algún caso particular, por edad por ejemplo, pueda ser útil. Digo en el resto de los casos. A nuestro perro ir aconjuntado no le motiva. Es un perro, no lo olvidemos. Ya viene con la mejor ropa posible: su pelaje. Pensado para todo: frío, calor, lluvia, sol. De serie y gratuito. Autoregulable. Con colores naturales que no destiñen. La ropa le incomoda, le agobia, le da calor, le roza por todas partes, y encima en las patas, con lo poco que les gusta…y por si fuera poco, con el peligro de que acaben mordisqueando, chupando o tragando lo que no les conviene. Es un perro no lo olvidemos. Dejémosle ser perro. Puestos a invertir, hagámoslo en un buen pienso, en juguetes que les ayuden a su estimulación mental, en el veterinario.
Déjale ser perro. Sí, en serio. Déjale ser perro. Por tu propio bien, por el de tu familia y por el propio bien del perro, no lo trates como a un ser humano y déjale ser perro.