Del 1 al cinco

Hace unas semanas estábamos hablando con unos amigos que tienen un hijo de la misma edad que Hugo. Los conocimos en las clases de preparación al parto (hablaré en otro post sobre estas clases). Ir un par de horas por semana y compartir momentos, dudas y miedos con gente que está en la misma situación que uno mismo, hace que tengas un vínculo con ellos. Su hijo, nació 5 días después y nos hemos ido encontrando, ya que viven en el mismo pueblo que nosotros, e incluso hemos ido a tomar algo con ellos.Sólo hemos ido una vez, y no me extraña. Imaginaos, vamos 4 adultos y 2 niños de más o menos 1 año. Ellos un refresco y cortado, y los papis de los monstruitos, que tenían hambre, un refresco, bocadillo y café. Y el pequeño monstruito, un croissant de chocolate. Sí, con 1 año ya le dábamos eso, cada uno...Nuestro monstruito sabía andar, aunque no muy bien, así que cuando se caía, pues lo normal: lo coges, lo levantas, palmadita en el culo y a correr.El suyo no andaba casi casi nada. Y en esas que se cae delante mío. Y yo qué hago? Pues lo mismo que con el mío: lo cojo, lo levanto, palmadita en el culo y a correr. NOOOOOOO. Al suelo que se fue el niño...Que calores me entraron. Claro, yo disculpándome, riéndome de forma nerviosa, porque no sabía donde meterme. No se hizo nada, pero claro, que mal...Llegó la hora de pagar (recordad lo que había tomado cada pareja). Pues sacamos el monedero para soltar los euros, y... nada, que no había nada... Así que ya se sabe quién tuvo que pagar, no?Nunca más hemos ido a tomar algo con ellos, por qué será... Eso sí, los seguimos viendo y hablando sin problemas.

Retomando el hilo... El padre de la criatura me enseñaba como su hijo se sabía los números en inglés. A mí me sorprendió, la verdad. El padre iba sacando dedos y el pequeñajo iba diciendo los números del 1 al 5 en inglés. Y oye, que se le entendía bastante bien!Nuestro monstruito grande eso de los números... sabe cuando hay una chuche, cuando hay dos dice seis, y cuando hay más de dos dice: Por qué hay muchas? No es algo que nos preocupe demasiado, ya que por ahora es más de "colel y volal" (no es chino, no), y ya tendrá tiempo, pero ahí me quedó algo clavado ya que hace un tiempo le enseñamos los colores y bien, pero los números... Al igual que nosotros cuando vamos en coche, uno dice a la derecha, otro dice a la izquierda y el GPS dice: cruce la rotonda, en la cuarta salida gire a la derecha. Y tú no paras de dar vueltas a la rotonda porque sólo ves 3 salidas !!

Así que empecé a mirar por Internet algún recurso para enseñar los números, pero quería algo diferente, mío, y sobre todo, implicar a los dos monstruitos. Así que pensando, pensando, dije: voy a escribir un mini-cuento muy chorra para divertirnos y que se le vaya quedando eso de los números. Pero primero en castellano, mejor... 
Y aquí está el resultado:
Esta mañana, Rosa la mariposa se ha despertado con ganas de ir a la guardería. Allí se encuentra con sus amigos, la cerdita Lolita y el gato Cucufato.La señorita Maribel les enseña los números con un bonito poema:
Uno es el primero que tenemos
Dos es la pareja y buen amigo
Tres son multitud, pero yo sigoCuatro, silla al revés. DescansemosCinco. Ese cinco, toda la mano
Así es como todos los amigos de Rosa aprenden los números.Cuando acaban este poema, y antes de ir al patio, se lavan las manos y cogen las chaquetas. Ya están preparados para jugar a lo que más les gusta: con las CAJAS DE CARTÓN!
Y cuento contado, cuento acabado.