DEL DESAFÍO, NO ME FÍO (Crónica 2ª abono Feria de Málaga)

(Fotografía: @SantanadeYepes)
Plaza de toros de Málaga
Lunes 19 de agosto 2013 / 2ª de abono / Un tercio de entrada
Se lidiaron seis toros de Fuente Ymbro, desiguales de presentación. 1º, 2º y 6º justos. Más chicos 3º y 4º. Impresentable, indigno para Málaga, el 5º. Todos mansearon; sin casta; sin fuerza.
SALVADOR VEGA: media atravesada y un descabello (Silencio) – Pinchazo saliéndose, estocada, tres descabellos, se echa (Silencio)
IVÁN FANDIÑO: dos pinchazos yéndose y descabello (Silencio) – Pinchazo, bajonazo y dos descabellos (Silencio)
DANIEL LUQUE: estocada caída y trasera (Vuelta tras petición) – Estocada trasera y tendida (Silencio)
DEL DESAFÍO, NO ME FÍO
Por José Daniel Rojo

Cierto es que se ha gestado con ilusión una idea que resulta interesante para ir educando a una afición más torerista y populacho que torista. Pero hay que asentar unas bases, establecer unos principios que en este caso particular pasa, fundamentalmente, por el toro. Para empezar, un sinsentido hacer un desafío ganadero en dos días y con dos ganaderías que vienen a ser polos opuestos. Sinsentido también hacer este desafío cuando se anuncia a bombo y platillo que este año, por la tardanza en la concesión de la plaza, no se han podido encontrar corridas del todo adecuadas. Al final, el rey de la Fiesta fue ninguneado en los corrales, teniendo que traer el ganadero más toros para poder lidiar la corrida completa. Idem con Victorino Martín en la corrida que lidiará hoy, que de los toros reseñados solo se aprobaron tres y tuvo que traer más toros el ganadero para poder lidiar la corrida completa. Y por si faltaba algo, muy poco compromiso el que se ha visto por parte de las cuadrillas, a las que se les ha querido dar un protagonismo especial en este desafío. Con todos estos ingredientes, hay que andar sobrado de confianza como para fiarse del desafío.
Fueron saliendo Fuente, algunos Ymbros, y otros Ymbrillos, y a cual peor. Manseando desde salida, escarbando, buscando tablas, sin fuerza; lo que viene siendo lo contrario a lo que debe ser un toro bravo, para entendernos. De la suerte de varas mejor ni hablar; no es que esté en extinción, es que ha desaparecido ya. En banderillas, salvo los pares de banderillas de Víctor Nieto en el cuarto, poco más digno de ser destacado. Curioso que en el tercero de la tarde el Presidente cambiara el tercio con solo dos pares de banderillas cuando uno de los objetivos de este desafío era el de resaltar todos los tercios de la lidia… También llamativo que la Banda de Música arranque a sonar en el momento en el que el toro va a ser arrastrado por el tiro de mulillas, quedando minimizada la reacción del público al juego brindado por el animal mediante el aplauso o la protesta. Esta reacción por parte de la música es novedad este año y desconozco el motivo, aunque en una corrida de toros es importante ese momento del arrastre del toro, y más todavía en un desafío ganadero. Aquí en Málaga no importa.
Salvador Vega no pudo celebrar felizmente el décimo aniversario de alternativa al estrellarse con dos oponentes que no le brindaron opciones. Un ramillete de verónicas y el inicio desde los medios a su primero, fue lo más destacado. Sus toros se pararon y ahí acabó todo.
Fandiño pareció no venir muy decidido a Málaga. A pesar del nulo juego que le ofrecieron sus oponentes, se vio a un torero tomando demasiadas precauciones y sin terminar de verlo claro. Bilbao lo tiene a la vuelta de la esquina y su mente estaría allí. Aquí se topó con un manso que se defendió siempre echando la cara arriba y con el que abrevió. Y otro al que le dio la oportunidad de dejarlo venir de largo para comenzar la faena de muleta pero que solo aguantó dos series. Cantó la gallina demasiado pronto y con las mismas lo pasaportó, malamente por cierto, el torero vasco.

Visto lo visto, Victorino Martín tiene la última palabra. Y su palabra, que ha quedado dicha en algún medio, es que no era partidario de este desafío ganadero. Y el que avisa no es traidor, si no que se lo digan a Ricardo Gallardo.