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Del sueño del pasado al sueño del presente, de Juan Ignacio Ferreras

Publicado el 16 marzo 2016 por Pandora Magazine @PandoraMgzn

 

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Cualquier tiempo pasado fue peor
Clasificación: Novela
Editorial: ACVF

Del sueño del pasado al sueño del presente, de Juan Ignacio Ferreras

Bajo el título unitario “Del sueño del pasado al sueño del presente” se han editado tres novelas cortas: “Coro”, “Calle” y “Centinela” En ellas vamos a encontrar un recorrido histórico por la realidad más próxima a la mayoría de quienes lean el libro. Es decir, lo que se ha catalogado como <españolitos de a pie> toda la vida. Aunque ahora, a unos les pueda sonar despectivo; a otros, entre los que me incluyo, nos resulta una buena descripción de lo que somos.
En el primer libro, “Coro” encontramos la parte más antigua. Una familia de principios de siglo de esas que eran propietarias de tierras, casas, ganado… Con la llegada de la industria, también de minas. En ese contexto, ser señorito podía ser un chollo o no, según se mirase. Si uno tenía debilidad por las mujeres y acababa corriendo ciertos riesgos con quien no debía –el clasismo entonces era mucho y me temo que hoy vuelve a serlo también, remito a otra novela reseñada recientemente, “La sonrisa del melón”, de Carlos del B. Iglesias. El caso es que entonces no tenía uno, ni una, ninguna libertad para emparentar con quien quisiera si era de buena familia- como el tío Alberto en el relato, le mandaban a uno a Cuba a que se desfogara allí sin querer saber nada del enviado en una buena temporada.
El caso es que allá por el 1898 la cosa se puso fea en Cuba y, al tiempo que unos iban a perder la vida, un brazo, una pierna, la novia o cualquier otra cosa; el bueno de Alberto se volvió, desfogado ya, para recuperar su lugar y sus posesiones. Además, le habían reclamado ya que su padre se moría.
Cuando llega, se encuentra a su hermana que, para desgracia de ambos, era el amor secreto y prohibido. Resulta que ella, que estaba a punto de casarse, está tan enamorada del hermano como el hermano de ella. Una desgracia que provoca el propio sistema al tener los implicados tan pocas opciones de emparejamiento. Hay que tener en cuenta que la densidad de población no era, ni por asomo, la de ahora.
Dicho todo esto, hay cuestiones entreveradas muy interesantes. Los choques frontales entre esos valores tradicionales y los nuevos valores, la presentación acertada e inteligente de ese choque de valores a lo largo de los años y una propuesta que es la que me ha llevado a parar de leer y ponerme a escribir, ya, esta reseña. La idea de <los nuestros> frente a los que no son los nuestros. Tiene mucho que ver con la familia pero el libro lo lleva mucho más allá. Por ejemplo, en la siguiente generación está el tío Diego, al que también envían a Madrid por estar enamorado de la misma mujer que el tío Álvaro. Es decir, el tío Diego es sobrino de dos hermanos que viven juntos, sin hijos y que reciben visitas de un sobrino –Diego- que llega por sorpresa por amor a su tía, casi nada. La cuestión es que a Diego también le tienen que enviar a Madrid para evitar males mayores y se hace socialista que entonces era lo más a la izquierda que se podía hacer uno con cierta infraestructura que le respaldara.
Cuando vuelve, resulta que se tiene que enfrentar a los suyos. Antes se ha llevado una bofetada de su tío Alberto, que le quiere como a un hijo, no porque esté enamorado de quien no debe, sino por despreciar a sus hermanos y a sus padres. Por decir de ellos que son unos paletos.
Sin embargo, cuando vuelve de Madrid a enfrentarse con los terratenientes, sigue siendo <uno de los nuestros> y cuando preguntan por él explican que antes de que él llegara, perdía uno la mano en la mina y le mandaban a la calle sin indemnización, ni nada de nada. Es decir, sea uno lo que sea, lo que más me ha gustado del libro es la mirada positiva que pone en valor <lo nuestro> Puede que dado como está la cuestión y lo devaluado que está precisamente <lo nuestro> no sea mi reseña más popular. Por eso, porque creo que va siendo hora de una mirada en positivo de cada uno de nosotros y de nuestra historia por lo que he querido escribir esta reseña y recomendar el libro que hoy recomiendo.
Formalmente, es un libro sobrio, de cartoné y pasta blanca con una ilustración circular en rojo con un laberinto dentro. Tres novelas al precio de una que, dadas las circunstancias, se antoja muy buena oferta. Que las disfruten.

Adolfo Caparrós Gómez de Mercado


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