Antecedentes: El delirium se caracteriza por deterioro cognitivo agudo. Se examinó la asociación de delirium con trayectorias cognitivas a largo plazo en adultos mayores con enfermedad de Alzheimer (EA).
Métodos: Se evaluaron los datos recogidos prospectivamente a partir de una cohorte anidada de pacientes hospitalizados con EA (n = 263) en el registro de pacientes del Massachusetts Alzheimer Disease Research Center del 1 de enero de 1991 al 30 de junio de 2006 (mediana de tiempo de seguimiento de 3,2 años). La función cognitiva se midió utilizando information-memory-concentration (IMC) sección del Blessed Dementia Rating Scale. El delirium fue identificado mediante un método validado revisión de registros médicos. La tasa de deterioro cognitivo se contrastó mediante modelos de efectos aleatorios de regresión.
Resultados: 56% de los pacientes con EA desarrollaron delirium durante el ingreso. La tasa de deterioro cognitivo antes de la hospitalización no difirió significativamente entre los pacientes que desarrollaron delirium (1,4 [IC 95%, 0.7-2.1] puntos de IMC al año) y los pacientes que no desarrollaron delirium (0,8 [IC 95%, 0.3-1.3] IMC puntos por año) (p = 0,24). Después de ajustar por la gravedad de la demencia, la comorbilidad y las características demográficas, los pacientes que habían desarrollado delirium experimentaron un mayor deterioro cognitivo en la hospitalización año siguiente (3,1 [IC 95%, 2.1-4.1] IMC puntos por año) respecto a los pacientes que no habían desarrollado delirium (1,4 [IC 95%, 0.2-2.6] IMC puntos por año). La relación de estos cambios sugieren que el deterioro cognitivo tras presentar delirium tiene una tasa del doble al año después de la hospitalización, en comparación con los pacientes que no desarrollaron delirium. Los pacientes que habían desarrollado delirium mantuvieron una tasa más rápida de deterioro cognitivo a lo largo de un período de 5 años después de la hospitalización. Los análisis de sensibilidad que excluyeron a pacientes reingresado e incluyeron pacientes pareados por función cognitiva basal y tasa de referencia de deterioro cognitivo producen resultados esencialmente idénticos.
Conclusiones: Delirium es altamente prevalente entre las personas con AD que están hospitalizados y se asocia con una mayor tasa de deterioro cognitivo que se mantiene durante un máximo de 5 años. Las estrategias para prevenir el delirium pueden representar una prometedora vía a explorar para mejorar el deterioro cognitivo en la EA.