No puede ser de otra forma, ya lo dice el refrán: “noches de desenfreno, mañanas de hibuprofeno”. Pues eso, extrapolado a la falta de sueño de este fin de semana y a que esta noche la pasé de pena, redundan en que soy un cuerpo sin alma que se arrastra por el suelo, luchando por no desplomarse.
Pero bueno, demostrando fidelidad al proceso bloqueril en el que me encuentro inmerso, os dejo la canción de hoy.
Recordad que, esta tarde, toca la siguiente entrada sobre Android. Empezamos a meternos en el asunto, así que no os la perdais.