El conocido método anticonceptivo de Bayer DIU Mirena puede causar pseudotumor cerebral (PTC por sus siglas en inglés), que se produce por la peligrosa acumulación de presión de líquido en el cerebro con fuertes dolores de cabeza y pérdida de la visión, entre otros problemas. A la farmacéutica se le acumulan las demandas judiciales…
En una demanda judicial presentada a finales del pasado mes de junio en Nueva Jersey (Estados Unidos), Jessica Watson, indica que sufre visión borrosa permanente y otros efectos secundarios como seudotumor cerebral tras implantarse el dispositivo intrauterino (DIU) para el control de la natalidad.
El Mirena es un implante pequeño en forma de T que se coloca en el útero, donde libera la hormona levonorgestrel.
La demanda indica que las advertencias de Mirena son insuficientes, que a las usuarias no se les advierte adecuadamente sobre que este DIU puede causar una peligrosa acumulación de presión en el cerebro y que ello puede causar daño permanente al nervio óptico y otras reacciones adversas.
A Watson le implantaron el anticonceptivo en enero de 2012 como modo de control de natalidad. Sin embargo, en julio de 2014 examinó su vista al experimentar visión borrosa y tinnitus (o acúfenos, consiste en la percepción de ruidos en la cabeza, que no tienen nada que ver con una cuestión psiquiátrica). Fue al neurólogo y se sometió a resonancia magnética y diferentes pruebas.
Ni ella ni sus médicos sospechaban que la relación entre el pseudotumor y el tratamiento de Bayer hasta que a la mujer le retiraron el DIU porque tenía que someterse a otra punción lumbar para reducir la acumulación de líquido.
La progestina levonorgestrel sintética contribuye al desarrollo de estas afecciones, los fabricantes han de saberlo pero
a pesar del creciente número de eventos adversos, incluidos los informes de hipertensión intracraneal, ceguera, edema de papila y aumento de la presión intracraneal, los acusados no han hecho ningún esfuerzo por advertir a los médicos, la comunidad sanitaria o los pacientes del riesgo de desarrollar PTC con Mirena”, argumenta la demanda.
Watson ha presentado reclamaciones por negligencia, defecto de diseño, falta de advertencia, responsabilidad objetiva, incumplimiento de garantía, tergiversación negligente, tergiversación fraudulenta y fraude por supresión y ocultamiento de información de seguridad del producto.
Ahora trata de que la Justicia la compense por todos los daños que sufre y sufrirá. Y no es la única pues hay un número creciente de demandas en USA de mujeres que padecen pseudotumor cerebral tras ponerse el DIU Mirena.
La ocultación de información es muy grave pues impide a los usuarios y los médicos reconocer rápidamente los síntomas de PTC (y de otros males) cuando se producen e intentar atajar el problema antes que los daños sean mayores o crónicos.
En otros países, entre ellos Sudáfrica y Hong Kong, las precauciones a tener con el DIU Mirena están avisadas. Por ejemplo, se advierte que el edema de papila es un posible efecto secundario. Sin embargo, Bayer no ha dado a las mujeres o la comunidad médica de Estados Unidos la misma información.
Además de con pseudotumor cerebral, el DIU Mirena también se ha relacionado con perforación del útero o movimientos fuera de su correcta posición, causando graves lesiones internas a muchas mujeres. Hay un litigio concreto que reúne demandas de lesiones por la migración del dispositivo intrauterino que en la actualidad cuenta con cerca de 4.000 quejas ante el juez pendientes en Nueva York.
Hay que saber que los daños de los anticonceptivos “hormonales” están cada vez más reconocidos. Al respecto podéis leer mi post Nueva alerta sanitaria abunda en los problemas de los medicamentos anticonceptivos, en el que se cita el levonorgestrel, entre otros.
Y también hay que saber que a Bayer se le acumulan las demandas judiciales en todo el mundo por los daños de sus diferentes tratamientos anticonceptivos.
El penúltimo escándalo es el del Essure, un sistema que guarda similitudes con el DIU pues es un objeto en forma de muelle que se introduce en las Trompas de falopio y contiene unas fibras que provocan la inflamación de dichos órganos para que los óvulos de la mujer no bajen.
Los daños que está provocando son coincidentes también en ocasiones con los del DIU. Bayer lo sabe, no obstante las mujeres afectadas (en España superan con creces las 1.000) fueron hace unos meses a la Junta de accionistas de Bayer a explicárselo a sus directivos.
En el Bufete Almodóvar & Jara estamos investigando la cadena de corresponsabilidad por la omisión intencionada de información y por el mal funcionamiento de los servicios sanitarios públicos. Preparamos 21 demandas a tres actores diferentes de la citada cadena.
A la compañía Bayer se le acumulan los litigios en tribunales de medio mundo. Las primeras demandas judiciales por sus píldoras de hormonas (de marcas como Yaz, Yasmin, Gianvi, Ocella, Beyaz, Safyral) se presentaron en 2009 y aún hay miles de casos pendientes.
Bayer tiene, sólo en Estados Unidos, más de 4.000 juicios y reclamaciones. El principio activo de estos medicamentos, la drospirenona, ha provocado variadas lesiones en estas personas y ha causado un número no especificado aún de muertes.
La cantidad de reclamaciones es tal que la casa alemana ha llegado a casi 10.000 acuerdos extrajudiciales por valor de casi 2.000 millones de dólares. El principal daño causado es trombosis venosa profunda o embolia pulmonar.
En Alemania pusieron la primera demanda a Bayer por los daños que causan sus medicamentos anticonceptivos con hormonas. Por ello, la Coalición Contra los Peligros de Bayer exige la prohibición de los fármacos de ese tipo marcas Yaz, Yasmin o Yasminelle.
Italia se suma a los países en los que las mujeres afectadas por los anticonceptivos de Bayer están demandando judicialmente a la compañía. Existen casos escalofriantes como el de una joven de 36 años que lleva en coma diez años por las píldoras que contienen la hormona drospirenona. La Asociación Derecho y Salud cuenta con 100 socias e impulsa este nuevo frente legal.
En Francia, el seguro nacional de salud hace tiempo que no corre con los gastos de las píldoras que contienen drospirenona y el número de trombosis letales en mujeres jóvenes ha caído de manera notable.
A finales de enero de 2013, os contábamos que las autoridades sanitarias francesas imputaban cuatro muertes al consumo del medicamento Diane 35, también producido por Bayer.
Las pastillas anticonceptivas están denunciadas por provocar 23 muertes en Canadá. La mayoría de las víctimas fallecieron a causa de coágulos sanguíneos. No es lógico que para no quedarse embarazada una joven muera de trombosis.
Las autoridades de salud en el Reino Unido, los países del Benelux, Dinamarca y Noruega han difundido advertencias sobre los riesgos crecientes de tomar estos medicamentos. Son de los más usados en el mundo. Advertimos sobre su peligrosidad ya en septiembre de 2009 por un fallecimiento sucedido en Suiza tras el consumo de drospirenona (otras marcas aparte de las citadas son Aida y Petibelle y los genéricos Ocella y Gianvi comercializados en USA por Barr Laboratories).
En fin, la oferta de contracepción de Bayer es una joyita.
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