Hemos vivido estos dias, o al menos como yo, lo hemos visto por televisión, un proceso iniciático de algo positivo, de algo que en no mucho tiempo, esperemos que solucione la papeleta de la crisis y el bipartidismo.
Ese algo era la/s manifestaciones en Puerta del Sol, de jóvenes en PARO por sus derechos, incluido el derecho a minifestar libremente sus opiniones, creencias e ideas. O al menos eso dice la Constitución.
Pero no más allá de la realidad, sino en ella misma, hemos vivido, o hemos visto al menos, como esos derechos, utópicos en pleno siglo XXI, son tratados a porrazos, detenciones y cohibiciones de palabra, que no de voto, por supuesto, estamos invitados e incluso nos abrirán la puerta para entrar con su mejor sonrisa.
Indignante, lamentable y retrógradas estas imágenes de jovenes manifestantes, propias de los años dictatoriales, hasta los mismísimos de que no salgan oportunidades reales de empleo, que vean a diário como nuestros derechos son manejados, manipulados a su antojo, por un miserable voto, para nosotros, claro, para ellos es una forma más de seguir en el poder u oposición, lo mismo dá, ellos cobran igual, pero billetes claro.
Los golpes en las costillas se los han llevado estos pobres jóvenes que ninguna culpa tienen de lo que acontece alrededor, solo buscan su destino y su futuro rentable para vivir independientes. Vemos como hay más ancianos trabajando como jóvenes en paro, que no hay derecho y punto. Y lo único que piden es que votemos en blanco, para una democrácia todavía más blanca, pura y transparente. Como la Paz, como los derechos a manifestarse estipulados, una vez más, en la sagrada constitución de la PEPA.
VOTEMOS EN BLANCO. Ó votemos a los partidos minoritarios... Ke no digan k no hemos votao.