Revista Cultura y Ocio
En el año 1997, Depeche Mode se encuentra en uno de los peores momentos como banda, ya que la clásica historia de músicos engullidos por el éxito se personifica en ellos mismos y el grupo se sumerge en un pozo de difícil salida. Todo es una bola que viene desde 1987, pero la gira mayúscula que acompañó a Songs of faith and devotion (1993), llamada Devotional Tour, se extendió desde mayo de aquel año hasta julio del 94, con apenas dos meses de descanso en total, 158 conciertos ofrecidos y visitas a los cinco continentes. Durante la misma, están acreditadas las tensiones que surgieron dentro del grupo que eclosionaron en 1995 con la salida de Alan Wilder, quien dijo basta. Pero no fue lo único… ni lo peor, ya que Dave Gahan, el carismático cantante, el golfillo que agarrado a su micrófono ponía concierto tras concierto con sus bailes y movimientos toda la carne en el asador y levantaba a la audiencia tanto femenina como masculina, había pasado, a lo largo de los años, de gran aficionado a la bebida a coquetear con las drogas y, finalmente, a vivir con ellas. Ya durante la gira antes mencionada, en el que mostró un deterioro físico alarmante, sufrió un micro infarto en Nueva Orleans. En el verano de 1995 intentó suicidarse cortándose las venas. El colofón llegó el 28 de mayo de 1996 cuando estuvo muerto durante dos minutos por una sobredosis en Los Ángeles. Todo esto mezclado con matrimonios fracasados, tutelas parentales perdidas y la espiral de la fama fue un cóctel explosivo. El problema era gordo y serio, de hecho las sesiones de grabación de Ultra son largas, a Dave le esperaban camellos a la salida del estudio, y el grupo en gran medida dependía de él. Martin L.Gore tampoco pasa por su mejor momento y hasta al palmero de Andy Fletcher todo esto le afecta. Se llega a momentos límite, de casi abandonar.Pero la banda se recompone, no se sabe cómo, Dave se empeñó en reconducir su vida y desintoxicarse, y ya de paso, tomar clases de canto por vez primera, Martin tira del carro de la composición sin Alan Wilder y Fletcher sigue como el palomitero perenne.Había una canción en este disco Ultra de 1997, cantada por Martin y titulada Home, que es un tema crucial dentro de la historia del grupo, aquí Martin L.Gore coge las riendas de la nave, y no sólo compone sino que canta, y lo hace a su amigo Dave, y le da las gracias porque ha vuelto a casa, después de haber estado más muerto que vivo, con una preciosa melodía y una letra fantástica con ese estribillo precioso "And I thank you for bringing me here, for showing me home, for singing these tears, finally I’ve found that I belong here". Los arreglos orquestales deliciosos hacen el resto...
Os dejo con el tema y vídeo de Home.