Revista Cine

Der räuber (El ladrón), Austria 2009

Publicado el 23 noviembre 2010 por Cineinvisible @cineinvisib

El ser humano es el único animal destinado a tropezarse dos veces en la misma piedra, a repetir hasta la saciedad los mismos errores y a empujar de manera indefinida la piedra cuesta arriba, a sabiendas que, en cuanto dejemos de empujar, rodará de nuevo para volver a colocarse en el mismo lugar en el que se encontraba inicialmente. Hay algunos hombres que, a pesar de conocer las consecuencias que pueden acarrear, insisten en sus equivocaciones, como el austriaco apodado por la prensa Pumpgun Ronnie, por su fusil y la careta de Ronald Reagan que utilizaba en sus atracos a los bancos, que desencadenó a finales de los años 80 la persecución policial más importante de la historia de su país (filmada en la película con gran fuerza visual y un enorme sentido del movimiento).

Der räuber (El ladrón), Austria 2009

Martin Prinz, autor de una novela basada en estos hechos (por cierto, también hace un caméo en el film, figurando como el primer corredor del maratón de Viena), es también el guionista de la película  junto a su director, Benjamin Heisenberg. Las primeras imágenes del film, que compite en el Festival Internacional de Cine de Gijón, muestran al protagonista Johann Rettenberger, encarnado por el excelente actor Andreas Lust que borda su interpretación, centrado en su pasión, correr por el patio de la cárcel. Llegado el momento de su libertad condicional continuará entrenándose, día y noche, y hasta llegará a conseguir sus minutos de fama al establecer un nuevo récord nacional en la modalidad atlética de maratón.

 

Der räuber (El ladrón), Austria 2009

Su pasión podría haber servido para borrar sus antiguos errores. El empleado penitenciario que controla su libertad condicional cree que puede llegar a integrarse gracias a ello, dado que no posee ningún amigo y es de carácter introvertido. E incluso en la agencia de desempleo encuentra a una antigua conocida con la que establece una relación, pero este hombre parece habitado por un determinismo superior a fuerzas: tiene que seguir robando y corriendo para huir.

 

Der räuber (El ladrón), Austria 2009

Tras varios meses de libertad condicional este ladrón maratoniano ya ha realizado decenas de atracos bancos de la periferia de la ciudad de Viena, el dinero no parece interesarle en lo más mínimo y la película, que cuenta los hechos pero se ahorra explicaciones, deja inteligentemente al espectador decidir cuál es la verdadera finalidad o el motivo real de esta huida permanente. Sigmund Freud escribió que “todo acto frustrado o toda acción resultante de un error, expresan una voluntad oculta”. ¿Correr para escapar de qué, de quién? ¿De los demás, de sí mismo? El público encontrará las respuestas. 


Volver a la Portada de Logo Paperblog