Desastrosa segunda parte que acabó con todas las aspiraciones posibles de los Boston Celtics para hacerse con la victoria ante un rival tan sumamente competitivo cómo los San Antonio Spurs.
La actitud que a veces el equipo demuestra hace que ocurran cosas cómo la de anoche, cuando no llegamos tan siquiera a los 80 puntos y mostramos la peor cara de un equipo que pese a todo, puede ganar a cualquiera.
Era un partido entre dos equipos muy parecidos. Equipos que basan su mejor juego en estrellas veteranas y a los que aún les quedan cosas por afinar, en el que caso de Spurs que Parker vuelva a las canchas y en nuestro caso, recuperar el instinto ganador del 2008 y hacer que tanto Rasheed Wallace cómo Nate Robinson tengan buenas noches.
Dicho problema es el mayor que hoy día tenemos, Nate Robinson aportó 0 puntos jugando un partido muy malo para el poco tiempo que estuvo en cancha y Rasheed Wallace tan sólo se dedicó a realizar la labor de estorbo en la zona, dónde capturó 8 rebotes pero nada más, 1 - 4 en triple, 7 puntos... ayer, que era el día precisamente cuándo tenía que haber hecho mayor uso de la zona.
En resumen un mal partido que vuelve a encender las alarmas en Boston, no obstante el equipo viene de jugar muchos partidos seguidos y contra equipos muy exigentes, una derrota era previsible, aunque existan varias formas de caer derrotados y la de anoche no ha sido la más acertada.
El miércoles, próximo partido contra otro equipo de gran nivel cómo son los Oklahoma City Thunders, quienes vienen de derrotar a los Lakers y situándose en la sexta plaza del oeste empatados con los Spurs.
Por nuestra parte, tras la victoria anoche de los Atlanta Hawks, presentamos empate por la tercera plaza en la que previsiblemente nos tocaría enfrentarnos con los Miami Heat, esperemos seguir manteniendo dicho puesto sino queremos vernos las caras con los Bucks de primeras en los Playoffs.