Científicos
de la Facultad de Medicina y Odontología, y el Instituto Australiano
de Salud y Medicina Tropical han desarrollado una terapia con
medicamentos potencialmente revolucionaria que actúa como un
"torniquete farmacológico", reduciendo drásticamente la
pérdida de sangre interna hasta en un 60%. El fluido de
estabilización, compuesto por adenosina, lidocaína y magnesio, se
conoce como ALM. El equipo mostro como un solo un bolo IV de
ALM reduce en un 60% la perdida de sangre en un periodo de 60 minutos
lograndose una estabilizacion a las 4 horas aumentando asi la
supervivencia. El fluido ALM se administra por vía intravenosa y
circula por todo el cuerpo, eleva suavemente la presión arterial,
protege el corazón, el cerebro y demas organos, haciendo más lento
el sangrado. La singularidad del ALM es su pequeño volumen y
capacidad de proteger todo el cuerpo en el punto de daño. La
innovación es que tiene amplias aplicaciones militares y civiles
pre-hospitalarias en los ambientes tropicales, rurales y remotos ante
un traumatismo, hemorragia post-parto, shock hipovolemicos etc.