Concretamente, la cámara se utiliza para detectar la cara del usuario y calcular desde dónde está mirando a la pantalla. Entonces, y según el ángulo existente entre la cara y el terminal, la aplicación modifica el punto de vista de los gráficos para recrear el efecto tridimensional.
No hace mucho, recuerdo haber realizado una entrada relacionado con un efecto 3D para este tipo de pantallas y que tampoco necesitaba gafas. El ingenio se denominaba Palm Top Theater.
Vía: Microsiervos