Hace unos días madrugue mucho para acercarme a un colegio madrileño y gracias a Kellogg’s ver como niños de 3 a 12 años reciben un desayuno completo y sano para afrontar el día con fuerza.
Y es que en nuestro país un 30,1% de los niños menores de 16 años están en riesgo de pobreza, algo que hace que muchos de ellos vayan al colegio sin desayunar, lo que obviamente afecta a su rendimiento escolar.
Kellogg’s lleva desde el año 2011 con el programa Todos a Desayunar y se lo ofrece a más de 400 niños de momento en Madrid y en Valencia, la idea es llegar a más de 1000 en el próximo año.
Un lácteo, fruta, cereales y pan con mantequilla, un desayuno sano y con mucha energía para esos pequeños que sin ni siquiera saberlo, sufren la crisis.
Pequeños alegres, comprometidos con el proyecto, que se levantan una hora antes para ir a desayunar y ayudan a poner la mesa y a quitarla.
No me imagino la impotencia y la tristeza que tienen que sentir sus padres cuando llega la hora de despertar a los niños y ver que no les pueden dar el desayuno, os juro que no me lo puedo llegar a imaginar.
Nos centramos en nuestros problemas que nos parecen los más importantes del mundo y no nos llegamos a imaginar que algo así nos pueda pasar, que lleguemos al punto de no poder dar de comer a nuestros hijos y tiene que ser la mayor impotencia del mundo, la mayor.
En fin…
Ojalá que la situación económica de nuestro país vaya mejorando, ojalá que ese 30% de los niños que pasan hambre desaparezca, ojalá que nuestros niños sean solo niños, sin problemas, sin hambre, ojalá que todo vaya cambiando.
Pero mientras tanto gracias a Kellogg’s por la iniciativa, por hacer mejor el día de tantos niños, por hacer el mejor el día de todos sus padres, por hacer mejor la vida.
Gracias a Kellogg’s por enseñarme una lección, este año voy a pensar menos en mí y más en nosotros y este año cosmetik va a ser más solidario.
Vamos a hacer entre todos de este mundo un lugar mejor.