Revista Libros

Desbordado y triste por el plagio

Publicado el 23 septiembre 2014 por Abanicodelibros @RafaelAlcolea

Desbordado y triste por el plagio
Hoy me encuentro abatido, ninguneado, robado, violado, desvalido y desprotegido. Tantos meses de duro trabajo, sacrificios, horas robadas al sueño, a la familia, en definitiva a la vida; por dar vida a una historia y unos personajes con la ilusión de entretener, ayudar, distraer,etc. Todo eso que sacrifiqué para publicar mi novela se fue al traste hoy, cuando descubro que unos desalmados han publicado de manera gratuita mi libro desde varias webs piratas de descarga de libros.

La sensación es difícil de describir, ¿dolor? ¿impotencia? ¿ira? De todo un poco. Apenas pude dormir anoche tratando de averiguar cómo podía ponerle freno, pero creo que ya es demasiado tarde... El expolio de mi obra ha avanzado demasiado... como un cáncer terminal que ahoga a muchos autores y creadores.


 Ya no se trata de bajar los precios, no se trata de ir contra las editoriales; también nos atacan a los independientes que publicamos la obra por algo más de 1€, ¿es mucho pedir por una idea original, su desarrollo, revisiones, etc? Se trata del todo por el todo, del GRATIS absoluto, el 0€ en todo lo que se pueda, el soy más listo que los demás y me lo llevo todo por la cara. 
¿No os dáis cuenta que así estáis matando la cultura y quitándonos las ganas de seguir escribiendo?
Las ventas del libro han caído empicado desde el día que comenzó a distribuirse gratis, antes estaba entre los más vendidos. Lo que me fastidia es ver en esas webs cómo aumenta el número de descargas ilegales, en detrimento de las legales...
Algunos tal vez lo consideren un elogio, yo lo considero todo lo contrario. Aquel que realemente está interesado en tí o en tu obra va a comprarla. Lo único que permitiendo la descarga gratis se aniquila esa posibilidad. A nadie que le regalen la comida en un restaurante, sale de este para meterse en el de enfrente y pagar un menú por barato que sea, aunque te caiga muy bien el dueño del restaurante, seamos realistas.
Lo de ofrecer la obra de manera gratuita era buena opción hace años, hoy día no pues hay mucha oferta, de todas formas es una opción personal y pienso que un mínimo de reconocimiento a un trabajo debería haber. 
Tras un enfado monumental he llegado a una resignada conclusión:
Aquel que no pensaba comprar la novela no lo va a hacer nunca, sea al precio que sea, y por otra parte espero que les guste la obra (que les aproveche como diría alguno...) y a partir de ahora piensen en comprar mis libros cuando los vean las estanterías.
No sé si os ha pasado alguna vez esto, y si os bajáis libros intentad que no sean de los pobres currantes que estamos empezando.

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