Descifrando a la “Diosa-Madre” del Occidente.
Georgeos Díaz-Montexano – The Epiraphic Society
[Nota preliminar: mi más sincero agradecimiento para el investigador y escritor, José García Velázquez, por haberme consultado sobre el simbolismo e interpretación del motivo conocido como ídolo bi-triangular, lo cual me llevó a realizar el presente estudio.]
Uno de los motivos más enigmáticos del llamado Arte Rupestre esquemático de la península ibérica que bien podría ser un símbolo de alguna divinidad o diosa, es descrito como “antropomorfo” de tipo bi-triangular. Obviamente, ello es una mera clasificación paraeidólica, es decir, según lo que la mera forma sugiere ‘a prima vista’ a nuestra percepción mental, pero que no demuestra en lo absoluto que tal símbolo sea realmente una mera representación humana esquematizada. De hecho, en la mayoría de los casos carece de manos, pies y cabeza. Asumir lo que sería solo el tronco de un cuerpo humano, sin miembros ni cabeza, como una representación humana esquematizada es, desde luego, pretender “rizar -más aún- el rizo”.
Ahora bien, si lo interpretamos como lo que realmente me parece que es, un símbolo compuesto de al menos dos signos logofonográficos de la Escritura Lineal Pre-Tartessia (ELTAR), por ejemplo, tendríamos que este símbolo está compuesto por los signos de la D y la T. Este tipo de combinaciones de signos para crear símbolos o anagramas es algo muy conocido (principio jeroglífico o rebús) por los lingüistas que se han dedicado al estudio de los orígenes de las escrituras, y conocido también por algunos arqueólogos especializados en Arte Rupestre prehistórico, aunque lamentablemente son aún muy pocos.
Entre esos pocos estudiosos de Arte Rupestre que actualmente sí conocen estos principios de combinación de signos para crear otros (señal de la existencia de una sintaxis escriptural) se hallan los doctores María Ángeles Medina y Antonio J. Romero, ambos de la Universidad del País Vasco, quienes han advertido lo mismo en varias cuevas de Málaga con Arte Rupestre del Paleolítico Superior, especialmente en la célebre cueva de La Pileta, lo cual les ha llevado a presentar en un reciente congreso la hipótesis de que en tales cuevas malagueñas, los hombres del Paleolítico Superior (desde hace al menos unos 25 000 años) ya conocían los principios elementales de la sintaxis y la escritura misma, y que mucho de los signos geométricos simples, lineales, ideomorfos, etc., serían en realidad parte de un signario que ya era utilizado de acuerdo a una determinada sintaxis para escribir mensajes…
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Asumir lo que sería solo el tronco de un cuerpo humano, sin miembros ni cabeza, como una representación humana esquematizada es, desde luego, pretender “rizar -más aún- el rizo”. Ahora bien, si lo interpretamos como lo que realmente me parece que es, un símbolo compuesto de al menos dos signos logofonográficos de la Escritura Lineal Pre-Tartessia (ELTAR), por ejemplo, tendríamos que este símbolo está compuesto por los signos de la D y la T. Este tipo de combinaciones de signos para crear símbolos o anagramas es algo muy conocido (principio jeroglífico o rebús) por los lingüistas que se han dedicado al estudio de los orígenes de las escrituras, y conocido también por algunos arqueólogos especializados en Arte Rupestre prehistórico, aunque lamentablemente son aún muy pocos. Entre esos pocos estudiosos de Arte Rupestre que actualmente sí conocen estos principios de combinación de signos para crear otros (señal de la existencia de una sintaxis escriptural) se hallan los doctores María Ángeles Medina y Antonio J. Romero, ambos de la Universidad del País Vasco, quienes han advertido lo mismo en varias cuevas de Málaga con Arte Rupestre del Paleolítico Superior, especialmente en la célebre cueva de La Pileta, lo cual les ha llevado a presentar en un reciente congreso la hipótesis de que en tales cuevas malagueñas, los hombres del Paleolítico Superior (desde hace al menos unos 25 000 años) ya conocían los principios elementales de la sintaxis y la escritura misma, y que mucho de los signos geométricos simples, lineales, ideomorfos, etc., serían en realidad parte de un signario que ya era utilizado de acuerdo a una determinada sintaxis para escribir mensajes… Leer el artículo en http://atlantisng.com/blog/descifrando-a-la-diosa-madre-del-occidente/" data-orig-file="https://georgeosdiazmontexano.files.wordpress.com/2018/10/fireshot-capture-106-descifrando-a-la-e2809cdiosa-madree2809d-del-occidente-_-http___atlantisng-com_blog_.jpg" data-image-meta="{"aperture":"0","credit":"","camera":"","caption":"","created_timestamp":"0","copyright":"","focal_length":"0","iso":"0","shutter_speed":"0","title":"","orientation":"0"}" width="460" data-medium-file="https://georgeosdiazmontexano.files.wordpress.com/2018/10/fireshot-capture-106-descifrando-a-la-e2809cdiosa-madree2809d-del-occidente-_-http___atlantisng-com_blog_.jpg?w=460" data-permalink="https://georgeosdiazmontexano.wordpress.com/2018/10/13/descifrando-a-la-diosa-madre-del-occidente/fireshot-capture-106-descifrando-a-la-diosa-madre-del-occidente-_-http___atlantisng-com_blog_/" alt="Descifrando a la “Diosa-Madre” del Occidente. Georgeos Díaz-Montexano – The Epiraphic Society [Nota preliminar: mi más sincero agradecimiento para el investigador y escritor, José García Velázquez, por haberme consultado sobre el simbolismo e interpretación del motivo conocido como ídolo bi-triangular, lo cual me llevó a realizar el presente estudio.] Uno de los motivos más enigmáticos del llamado Arte Rupestre esquemático de la península ibérica que bien podría ser un símbolo de alguna divinidad o diosa, es descrito como “antropomorfo” de tipo bi-triangular. Obviamente, ello es una mera clasificación paraeidólica, es decir, según lo que la mera forma sugiere ‘a prima vista’ a nuestra percepción mental, pero que no demuestra en lo absoluto que tal símbolo sea realmente una mera representación humana esquematizada. De hecho, en la mayoría de los casos carece de manos, pies y cabeza. Asumir lo que sería solo el tronco de un cuerpo humano, sin miembros ni cabeza, como una representación humana esquematizada es, desde luego, pretender “rizar -más aún- el rizo”. Ahora bien, si lo interpretamos como lo que realmente me parece que es, un símbolo compuesto de al menos dos signos logofonográficos de la Escritura Lineal Pre-Tartessia (ELTAR), por ejemplo, tendríamos que este símbolo está compuesto por los signos de la D y la T. Este tipo de combinaciones de signos para crear símbolos o anagramas es algo muy conocido (principio jeroglífico o rebús) por los lingüistas que se han dedicado al estudio de los orígenes de las escrituras, y conocido también por algunos arqueólogos especializados en Arte Rupestre prehistórico, aunque lamentablemente son aún muy pocos. Entre esos pocos estudiosos de Arte Rupestre que actualmente sí conocen estos principios de combinación de signos para crear otros (señal de la existencia de una sintaxis escriptural) se hallan los doctores María Ángeles Medina y Antonio J. Romero, ambos de la Universidad del País Vasco, quienes han advertido lo mismo en varias cuevas de Málaga con Arte Rupestre del Paleolítico Superior, especialmente en la célebre cueva de La Pileta, lo cual les ha llevado a presentar en un reciente congreso la hipótesis de que en tales cuevas malagueñas, los hombres del Paleolítico Superior (desde hace al menos unos 25 000 años) ya conocían los principios elementales de la sintaxis y la escritura misma, y que mucho de los signos geométricos simples, lineales, ideomorfos, etc., serían en realidad parte de un signario que ya era utilizado de acuerdo a una determinada sintaxis para escribir mensajes… Leer el artículo en http://atlantisng.com/blog/descifrando-a-la-diosa-madre-del-occidente/" height="415" class="alignnone size-medium wp-image-9939" data-large-file="https://georgeosdiazmontexano.files.wordpress.com/2018/10/fireshot-capture-106-descifrando-a-la-e2809cdiosa-madree2809d-del-occidente-_-http___atlantisng-com_blog_.jpg?w=474" />Origen: Descifrando a la “Diosa-Madre” del Occidente.
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