Los resultados de una investigación
del King's College de Londres publicados en The Lancet Neurology cuestionan la visión tradicional de la enfermedad y proporcionan la primera evidencia
que sugiere que los cambios en el sistema de la serotonina podrían actuar como
una señal de alerta temprana clave años antes de que los pacientes comiencen a
mostrar síntomas para la enfermedad. Las personas con enfermedad de Parkinson
tienen una acumulación de la proteína α-sinucleína en el cerebro. Si bien no
hay una causa clara para la mayoría de las personas, una minoría de los casos
son causados por mutaciones genéticas. Los datos de las personas con
mutaciones en el gen SNCA se compararon con pacientes con enfermedad de
Parkinson no genética y voluntarios sanos. Los investigadores encontraron que
el sistema de la serotonina comienza a funcionar mal en las personas con Parkinson
antes de que se presenten los síntomas que afectan el movimiento y antes de los
primeros cambios en el sistema de la dopamina.
Revista Salud y Bienestar
Los resultados de una investigación
del King's College de Londres publicados en The Lancet Neurology cuestionan la visión tradicional de la enfermedad y proporcionan la primera evidencia
que sugiere que los cambios en el sistema de la serotonina podrían actuar como
una señal de alerta temprana clave años antes de que los pacientes comiencen a
mostrar síntomas para la enfermedad. Las personas con enfermedad de Parkinson
tienen una acumulación de la proteína α-sinucleína en el cerebro. Si bien no
hay una causa clara para la mayoría de las personas, una minoría de los casos
son causados por mutaciones genéticas. Los datos de las personas con
mutaciones en el gen SNCA se compararon con pacientes con enfermedad de
Parkinson no genética y voluntarios sanos. Los investigadores encontraron que
el sistema de la serotonina comienza a funcionar mal en las personas con Parkinson
antes de que se presenten los síntomas que afectan el movimiento y antes de los
primeros cambios en el sistema de la dopamina.
