Científicos de Northwestern Medicine identificaron nuevos genes implicados en el desarrollo de fibromas uterinos, mediante un metanálisis de estudios de asociación de todo el genoma. Identificaron 24 nuevas ubicaciones genéticas de riesgo y demostraron que casi 400 genes pueden contribuir al desarrollo de fibromas.
Además descubrieron que ciertas células inmunes también desempeñan un papel en el desarrollo de fibromas uterinos, además de las células del músculo liso. Datos de expresión de genes unicelulares de pacientes con fibromas uterinos ayudaron a identificar tipos de células causales con una mayor expresión de genes de alto riesgo. El estudio incorporó datos de personas con diversos ancestros, proporcionando una imagen más inclusiva del riesgo de fibromas uterinos.
Comparando la información con diferentes poblaciones, demostraron que las regiones del genoma asociadas con la enfermedad son únicas para cada población.
Los investigadores planean inhibir los genes identificados en modelos de la enfermedad para detener el crecimiento de los fibromas uterinos. El objetivo es comprender mejor la genética de la enfermedad para encontrar qué genes deben inhibirse para bloquear el desarrollo de los fibromas uterinos.
El estudio resalta la importancia de estudiar enfermedades en poblaciones de diversos ancestros, mostrando que las regiones del genoma asociadas con la enfermedad son únicas según la ascendencia. Esto proporciona una comprensión más completa del riesgo de fibromas uterinos en comparación con estudios previos que solo analizaron pacientes de ascendencia europea.
El estudio fue publicado en la revista Nature Communications .