En la isla balear de Mallorca se encuentra el enclave de Cala Ratjada, un paraíso natural con numerosas playas y todo tipo de infraestructuras turísticas.
Vista panorámica de Cala Ratjada. Foto: Olaf Tausch
Perteneciente al municipio de Capdepera, en Mallorca (Islas Baleares), Cala Ratjada es una localidad costera muy conocida en la isla balear. Cuenta con una excelente oferta turística de alojamiento, restauración y ocio, y dispone de puerto propio, desde donde salen los barcos que unen Mallorca y la isla de Menorca. También posee un animado puerto deportivo, situado al final del paseo marítimo que sale desde la playa de Son Moll.
Toda su línea costera es bastante abrupta, lo que dota a este enclave turístico de una gran cantidad de calas y de numerosas playas, ya que Capdepera posee 40 kilómetros de costa.
El clima de Cala Ratjada
Como en todas las Baleares, Cala Ratjada disfruta de un clima de tipo mediterráneo, con temperaturas suaves casi todo el año. Ello que hace que en invierno se convierta en un destino muy solicitado por los turistas de la tercera edad.
Las mayoría de las precipitaciones tiene lugar durante los meses de otoño, siendo de entre 450 y 650 metros cúbicos la lluvia que cae durante todo el año.
La temperatura media anual oscila entre los 16 y 18 grados centígrados. Por su parte, las temperaturas máximas diurnas en verano alcanzan los 31 grados, mientras que las mínimas nocturnas en invierno no suelen bajar de los nueve grados.
Qué ver en Cala Ratjada
En la misma Cala Ratjada se pueden realizar interesantes visitas culturales, entre ellas la del Palacio de Can March, con entrada en la calle Joan March. Está situado sobre un monte rodeado de jardines en el que se han instalado numerosas esculturas. Fue mandado construir a principios del siglo XX sobre la antigua Torre Cega del siglo XV, y pertenece a la conocida familia March.
Puerto deportivo de Cala Ratjada.
Foto: Igasspei
Otra visita obligada en la zona es la del faro de Capdepera, construido en 1861. Situado a 58 metros por encima del nivel del mar, desde él se disfrutan de unas maravillosas vistas sobre toda la costa y de la isla de Menorca.
La Torre Estucada (siglo XVIII) y el puerto deportivo son otros dos lugares que merecen una detenida visita.
La gastronomía de Cala Ratjada
La cocina tradicional de Cala Ratjada está marcada por la gastronomía de Mallorca, con platos tan típicos y deliciosos como los butifarrons, el trampó, el frit, las sopas mallorquinas o la caldereta de langosta. Otros productos típicos de la zona son las cocas, las ensaimadas y la sobrasada.
Pero en Cala Ratjada, dado su marcado carácter turístico, también se pueden encontrar todo tipo de restaurantes de cocina internacional, con cocina italiana, china, alemana o francesa, entre otras muchas.
Entre los restaurantes dedicados a la cocina tradicional más recomendables se encuentran Can Balaguer, Es Raco, Can Pere o Ses Rotges.
Alojarse en Cala Ratjada
La localidad de Cala Ratjada cuenta con todo tipo de alojamientos, desde hoteles de lujo a otros establecimientos más modestos, aunque la mayoría poseen unas vistas privilegiadas.
Entre los hoteles y apartamentos de Cala Ratjada destacan el hotel Lago Garden Apart-Suites & Spa Hotel, de cinco estrellas; los hoteles Sensimar Aguait & Spa, Bella Playa & Spa, Illot Suite & Spa, Green Garden y Prinsotel La Pineda, de cuatro estrellas; los hoteles Lux, Mar Azul, Diamant Junior, Dos Playas o Morón, de tres estrellas, y los apartamentos Triton, Ponent o La Perla Negra.
Playa de Son Moll, en Cala Ratjada, Mallorca. Foto: Enma Saura
Sol, mar, naturaleza, ocio, deportes, buenos alojamientos y una excelente restauración son muchas y buenas razones para elegir Cala Ratjada como destino vacacional.
Los atractivos de Cala Ratjada
Cala Ratjada es uno de los destinos favoritos de los más exigentes turistas alemanes, que hallan en este enclave todos los servicios y ofertas de ocio necesarios. En este complejo turístico se pueden encontrar un gran número de tiendas, especialmente de moda, además de disponer de todo tipo de actividades deportivas, como el tenis, el buceo, el golf o ciclismo. Entre sus numerosas playas cabe destacar las de Son Moll, Cala Mata, Caló D‘Es Cans, Canyamel, S'Arenalet D'Albarca o Sa Font Salada.
A pesar de ser un destino eminentemente turístico de sol y playa, Cala Ratjada es también un auténtico paraíso natural, ya que toda la línea de costa que va desde Cala Mesquida a Cala Agulla está considerada como zona de especial protección y santuario para las aves. Además, posee una gran extensión de pinares que destacan sobre el bello fondo marino.
Para los amantes de la noche, Cala Ratjada también ofrece una animada vida nocturna, con locales tan concurridos como las discotecas Bolero, Physical o Keops.