Descubriendo el universo de Yoko Ono

Para mí Yoko Ono era la mujer que acabó con el mítico grupo The Beatles. Mi ignorancia era tal sobre la figura de esta artista que la exposición del Guggenheim de Bilbao me ha descubierto una figura idealista, conceptual, rompedora, precursora e inspiradora, diría yo, de muchas de las denominadas divas del show business actual.

Me encontré un Bilbao en fiestas que abría sus museos bajo un precio único para visitar todas sus exposiciones. Sin duda, la de Yoko Ono se llevaba la palma. Hasta 200 obras que se componen de objetos, libros, escritos, audios, vídeos, performances o fotografías distribuidas en distintas secciones engloban la exposición ‘Yoko Ono. Half-A-Wind Show — Retrospectiva’ que, según rezaba en el folleto explicativo se organiza con motivo del ochenta aniversario de la esposa del ex beatle.

No sabría muy bien definir muchas de las composiciones que allí se mostraban ni desde luego el conjunto, aunque pienso que si en el siglo XXI me sorprendió la mayoría de los objetos que formaban la exposición, el shock que le debió suponer a ciertos sectores conservadores de la sociedad de la época pudo ser mítico.

Conceptos que hoy en día se siguen utilizando como el de todos somos agua o las cápsulas de aire me vuelven a reafirmar que en este mundo está todo inventado y que es muy difícil innovar. Quizá solo innove el que abarque más sapiencia, más cultura, quien tenga tiempo, ganas o dinero de viajar y conocer y no quedarse siempre viendo la misma película.

Para colofón un árbol, un árbol de los deseos que eche raíces y los haga crecer. Yo colgué el mío. De hecho, siempre que tengo oportunidad de pedirlos lanzo uno al aire, ese aire que nos orea los pensamientos y nos refresca el alma.

Por cierto, la exposición estará hasta el próximo 4 de septiembre. No soy crítico de arte, tal vez no haya descrito con profesionalidad todo lo que ésta abarca, pero si el fin último del arte es provocar una emoción en el espectador, sin duda la de Yoko Ono las provoca raudales.