Aunque siempre surge un malaje que intenta chafarte la ilusión (“¿¡Cómo!? ¿No los conocías? Yo ya los oía/leía/disfrutaba antes de que nadie supiese de su existencia”), ¡qué emoción encontrar algo que -¡a la mierda la primicia!-, para uno tiene el sabor de la primera vez!
Los cuentos de Raymond Carver. O Motorcity is burning de MC5: