Descubriendo tierras cercanas: Palencia.
A la catedral de Palencia la llaman la bella desconocida, aunque bien se podría trasladar el término al resto de la provincia. Vamos con los argumentos: esta zona de España posee la mayor concentración de arte románico de Europa vinculada, en parte, al Camino de Santiago, también tiene, en el norte, montañas de gran belleza y, repartidos por su territorio, pueblos repletos de patrimonio y grandes iglesias, como Ampudia. A esto se le suma un canal que tardó en construirse cerca de un siglo y algunos proyectos innovadores que sirven de escenario para eventos veraniegos. ¿Os animáis a conocerla?
Ampudia. El pueblo del castillo y de la Giralda
Esta ciudad fue la puerta de entrada a mi viaje por tierras palentinas. Aquí organizan, cada año, un festival de la cerveza al que me invitaron y que se convirtió en la excusa perfecta para poner en el mapa localidad y provincia.
A lo lejos, en medio de un paisaje llano y lleno de molinos de viento, destaca la torre la Colegiata de San Miguel, a la que se conoce como La Giralda de Campos – el nombre de la comarca -. Está ubicada en el centro del casco histórico, cerca de las calles porticadas de este pueblo declarado conjunto histórico artístico. En la oficina de turismo, un antiguo hospital, se puede visitar el Museo de Medicina. Su colección recoge instrumentos médicos antiguos, algo macabros. También tiene interés el museo de arte sacro aunque, si algo me gustó, fue la visita al antiguo castillo. La construcción, del siglo XV, fue adquirida por Eugenio Fontaneda. Sí, el de las galletas. Además de empresario, Fontaneda era un gran coleccionista y hoy sus salas albergan un sinfín de objetos que se interpretan en la visita guiada.
Para entender un pueblo y sus formas de vida, tan importante como los grandes edificios son las muestras de arquitectura popular, y de esto también hay bastante. Los palomares, algunos derruidos, otros mejor conservados, se extienden por toda la comarca de Tierra de Campos y nos hablan de la economía del pasado y de los gustos gastronómicos de su gente.
El castillo de Ampudia
La Colegiata de San Miguel
San Pedro Cultural. Un trocito de cielo dentro de una iglesia.
San Pedro Cultural fue la sorpresa del viaje. Es un proyecto reciente, que lleva pocos meses funcionando y que, sí o sí, merece la pena. Por su singularidad, por la mezcla de patrimonio e innovación y por la pasión que pone Fran, guía del museo, para explicar el proyecto. Pero, ¿en qué consiste?
En Becerril de Campos existían las ruinas de una iglesia que combinaba estilos románico y gótico. De ella, solo quedaban tres paredes y algunos arcos. Ni rastro de la torre. Decidieron restaurarla pero creando algo original: un espacio vinculado a la astronomía, a la ciencia y al cielo. Para ello, conservaron los viejos elementos arquitectónicos y, en las obras, descubrieron restos nuevos, como lápidas o frescos, pero lo que realmente llama la atención son los añadidos posteriores: una línea meridiana (la única que realmente funciona en España), un péndulo de Foucault, el techo estrellado tal y como estaría en la noche de San Pedro y el espacio necesario para realizar eventos, conciertos o exposiciones, como la que hay ahora dedicada al libro de El Principito.
Se enseña con una visita guiada que dura unos 45 minutos.
San Pedro Cultural, Becerril de Campos
San Pedro Cultural, Becerril de Campos
El canal de Castilla. 100 años de trabajo, 10 años de funcionamiento.
El Canal de Castilla podría protagonizar un capítulo de la serie “Megaconstrucciones”. En el siglo XVIII se proyectó un gran canal que tendría varios objetivos. En primer lugar, convertirse en una vía de comunicación, también serviría para dotar de agua a pueblos y regadíos y, por último, como una fórmula de desarrollo industrial de las comarcas por las que pasaba.
Por problemas económicos y vicisitudes históricas se tarda unos 90 años en construir los 200 kilómetros del canal y sus esclusas. Cuando por fin se logra, tras diez años de funcionamiento, empieza el declive. El motivo: el tren llega a la zona y transportar las mercancías y los pasajeros es mucho más rápido y fácil.
Hoy además de servir para abastecer de agua a los pueblos y los cultivos, se aprovecha para el turismo. Hay dos barcos que recorren con nostalgia algunas partes del canal y existe un museo, más bien un centro de interpretación, en Villaumbrales, donde es posible conocer la historia de este proyecto de la Ilustración española.
El museo del Canal de Castilla en Villaumbrales
El Canal de Castilla
Villa La Olmeda. La casa de un rico romano.
Es la segunda villa romana en importancia de Europa y resulta, cuanto menos, curioso que un yacimiento de semejantes características y tan bien adaptado, no se conozca demasiado fuera de Palencia. Al menos, esa es la percepción de los trabajadores de la Villa Romana de la Olmeda, en Pedrosa de la Vega.
Esta villa fue la gran mansión de un señor romano. Construida en el siglo IV, la casa – enorme – nos habla de la historia, del arte, de los modos de vida, de las modas de diferentes épocas y de los intercambios comerciales e influencias artísticas que existían entre las diferentes provincias del imperio.
El punto fuerte de este yacimiento, descubierto en 1960, son sus mosaicos, los cientos de metros cuadrados de mosaico que se han encontrado en perfecto estado en las excavaciones y que permanecen, ya consolidados, en su lugar original.
La visita a la Villa La Olmeda se completa con el museo del pueblo de Saldaña, a tres kilómetros, donde se exhiben gran parte de los objetos rescatados de este yacimiento romano.
Villa Romana La Olmeda – Mosaico
Villa Romana La Olmeda
Palencia en la radio
Y si queréis saber más, esta madrugada, a las 3:30 en El Canto de Grillo (RNE), podréis escuchar los sonidos grabados en el viaje. Buscad vuestro dial o entrad en la web de www.rtve.es/radio y escuchadlo en directo.
Estas cuatro paradas, (de la capital ya hablaré otro día), están en el sur y en el centro de Palencia, una zona árida y llana, con colores que varían según la época del año. En próximos viajes me esperan la montaña y la ruta de los lagos, las iglesias románicas del camino de Santiago y los paisajes desiguales de la zona norte.
De momento, me quedo con ganas de volver.
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