Revista Música
En el nombre está la clave. Si no, pregúntenle al combo de Valladolid, Arizona Baby, que sin necesidad de ser oriundos del Viejo Oeste estadounidense, generan sonidos donde se huele perfectamente desierto, arena, cactus y pólvora quemada. Explotando casi la misma veta que sus colegas de Calexico, Arizona Baby ofrece un rock aceitado cubierto con esencia de vaqueros que coquetea por momentos con el blues más atascado y el country en estado rasposo.
Formados en 2003, Arizona Baby ha sabido generar mucho ruido a base de canciones épicas que los han llevado incluso al Olimpo (por más exagerado que se lea); de ahí que ya hayan sido teloneros de leyendas vivientes como Mark Knopfler y Chris Isaak. Con un pie dentro del folk de frontera y el pop polvoroso y desértico,Arizona Baby usa las guitarras para transmitir una música que en su geografía natal les ha regalado las mejores críticas y que llega a México para desparramar su salvaje sonido donde el country es mordido por serpientes sonoras que salen de la pedal steel y las seis cuerdas con aires de Oeste puro.
Esto es Arizona Baby "Shiralee".
(www.chilango.com)