Norelys Morales Aguilera.- Hoy sábado 19 de mayo del 2011, aviones de combate franceses han disparado por primera vez contra Libia y después de una búsqueda en Internet, acabo coincidiendo con Silvio Rodríguez: “Le deseo a Libia algo mejor que Gadafi. Y a la bota extranjera que la humille le deseo un Vietnam.”
Pero, también deseo a Sarkozy, tan presto para agredir, que solo explique a los franceses, contra quienes ha usado bien la represión, lo que todos saben que debe explicar sobre sus vínculos con Gadafi porque su luna de miel con la secretaria de Estado Hillary Clinton muestra por qué Obama, en otra guerra más, se va de gira por América Latina.
Deseo que de algún modo Rusia y China tuviesen una razón que no fuera el interés, para abstenerse y no usar su derecho al veto en la ONU, que tanto emplea Estados Unidos para favorecer a Israel.
Y, deseo, unir mi voz a la de Marx: ¡Proletarios de todos los países, uníos!, (Proletarier aller Länder, vereinigt euch!), que será la única forma de sobrevivir, que no otra cosa nos está pidiendo Fidel.
Hoy, 40 manifestantes han sido asesinados en la plaza Taghrir de Sanaa, en Yemen, cuyo gobierno es apoyado por los EEUU y por Arabia Saudí, escribe Santiago Alba Rico.
Hoy ha sido volado el monumento de la plaza de la Perla, en Bahrein, país ocupado desde el miércoles por tropas de Arabia Saudí movilizadas para reprimir las manifestaciones en las que han muerto ya algunas decenas de personas.
Hoy los iraquíes han vuelto a salir a la calle para reclamar pan y libertad, en manifestaciones que se repiten desde hace semanas, con numerosas víctimas mortales, en un país destruido de arriba abajo por los EEUU y sus aliados.
Esta semana han seguido en Marruecos y en Argelia las protestas en las calles contra nuestros amigos dictadores.
Esta semana Palestina ha seguido reclamando el fin de la ocupación israelí, apoyada por EEUU y la UE.
Esta semana han muerto decenas de personas en los cotidianos bombardeos estadounidenses sobre Afganistán y Pakistán.
Zapatero acaba de declarar, tras anunciar la participación de España en las operaciones militares contra Libia: “Nuestra responsabilidad está con el pueblo de Libia”.
Nuestra responsabilidad, la de los pueblos europeo y estadounidense, es la de salir a la calle, no sólo para protestar contra la intervención, no, sino para mandar a Zapatero y a Rajoy, a Sarkozy, a Berlusconi, a Obama y Clinton (y a todos los demás) a hacer compañía a Mubarak y Ben Alí. Mientras eso no ocurra, ni el pueblo de Libia podrá librarse de Gadafi ni el mundo pronunciar ciertas palabras sin atragantarse.