Deshojando la margarita entre móvil y cáncer

Se me han adelantado en esta noticia pero no importa, merece una reflexión. Seguramente se han enterado del discreto revuelo provocado por un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS)en el que señala que "utilizar teléfonos móviles puede incrementar el riesgo de sufrir ciertos tipos de cáncer cerebral en humanos". Este documento, realizado por un grupo de trabajo formado por 31 científicos de 14 países, reunidos en Lyon (Francia), en la sede de la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC, siglas en inglés) ha sido criticado por su falta de concreción y por dejar muchos interrogantes abiertos. Sus conclusiones finales serán publicadas en los próximos días en la web de la IARC y el 1 de julio en la revista científica The Lancet Oncology y, al parecer se limitan a la relación entre los móviles y el glioma (tumor cerebral maligno) y el neurinoma del acústico (un tumor benigno del oído) entre aquellas personas que usaban mucho el móvil, entendiéndose por estos las personas que al menos llevan 10 años usando el móvil unos 30 minutos al día. Los expertos también han analizado los diversos estudios que existen sobre la influencia de los campos electromagnéticos en la salud. Además del uso de los móviles han analizado los efectos de la exposición a los radares y microondas, a las señales de radio y televisión y las telecomunicaciones inalámbricas.n realidad se trata de un resumen de las conclusiones a las que han llegado , un organismo dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Muchos de los estudios se hicieron con móviles antiguos y los modernos irradian menos. Lógicamente las operadoras de móviles estarán en contra de este informe pero es un aviso para navegantes dirigido hacia los jóvenes y a sus padres para evitar el posible aumento de estos tumores.Son bastante conocidas y poco utilizadas estas recomendaciones: utilizar el kit de manos libres y enviar mensajes de SMS en lugar de mantener una conversación, siempre que sea posible, mantenerlo alejado del cuerpo al menos 40 centímetros (lo que implicaría el uso de manos libres), apagar el móvil siempre que no se vaya a utilizar y evitar dormir con él en la cabecera de la cama.
Debo reconocerles que hablo poco por teléfono pero me cuesta seguir las otras recomendaciones.