Como es lógico, a estas edades, siempre hay goleadas escandalosas. Desde las diferentes federaciones de fútbol se plantean varias soluciones. Detener el marcador cuando alguno de los dos equipos llegue a diez goles de diferencia. Así los niños siguen jugando por el mero placer de realizar su deporte favorito, despreocupados del marcador. Otros proponen no publicar los goleadores... Aunque no todos están de acuerdo. Hay padres que quieren que sus hijos sigan figurando como los pichichis de sus respectivas ligas. Ya sabe que hay mucho padre infeliz que desahoga su frustración proyectándose en su hijo. A lo mejor si él hubiera entrenado duro en su niñez, hoy sería ese campeón que anhela en casa. No es problema sencillo como ve.
De cualquier forma. ¿Humilló el vencedor al vencido? ¿Por qué? ¿Por realizar su trabajo bien? A lo mejor es más humillante para el rival que el otro equipo juegue a medio gas para no golear. Lo digno del deporte es dar el máximo. Claro que hay que enseñar a ganar y a perder.
Se puede enseñar respeto al rival goleando. Y también se puede humillar al rival con un irrisorio 1-0. Los que están a favor de despedir al entrenador, ¿qué mensaje están transmitiendo a sus hijos? ¿Que no se esfuercen? ¿Que el día de mañana no estudien mucho en el cole, o en la universidad, o incluso en la oposición para no humillar a sus compañeros? ¿Quieren que en sus trabajos no se esfuercen? ¿Alguien en su sano juicio piensa que Steve Jobs fue un abusón? ¿Rafa Nadal no debería ganar más torneos? Es una nueva ridiculez de los posmodernos trasnochados por pretender una igualdad ficticia. Empieza a causar hartazgo que se siga premiando la mediocridad en lugar de la excelencia.Piensen.
Sean buenos.La canción regalo de hoy es Happy, y viene de la mano de doña @RaquelMtnez_tve. A lo mejor todos seríamos más felices si hiciéramos bien lo que se supone que tenemos que hacer. Con todos ustedes: ¡Pharrel Williams!
https://www.youtube.com/watch?v=y6Sxv-sUYtM